Del MWC a realidad mundana: Barcelona comprará 600 robots inteligentes para complementar la atención domiciliaria

El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado la licitación para comprar 600 asistentes robóticos inteligentes (ARI) para el proyecto piloto de teleasistencia avanzada a domicilio, con un presupuesto de 3.799.023 millones de euros procedentes de Fondos Next Generation EU, ha informado el consistorio este sábado en un comunicado.

La reciente aprobación por parte del Ayuntamiento de Barcelona de la licitación para la compra de 600 asistentes robóticos inteligentes (ARI) forma parte de un ambicioso proyecto piloto de teleasistencia avanzada a domicilio. Este proyecto tiene como fin mejorar la calidad de vida de las personas mayores que están en las primeras fases de deterioro cognitivo o que son dependientes, facilitando su autonomía en el hogar mediante la integración de tecnologías innovadoras.

El robot social ARI tiene la capacidad de mejorar el bienestar de los usuarios al monitorizar su entorno, detectar situaciones de emergencia, como caídas o accidentes domésticos, y ofrecer recordatorios sobre actividades diarias. De esta forma, los ARI no solo actúan como dispositivos de asistencia tecnológica, sino también como herramientas de apoyo emocional, ayudando a combatir la soledad no deseada, un problema creciente en la sociedad.

Resultados e inversión

En este contexto, el Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, que se celebra cada año en la ciudad, ha jugado un papel crucial en el impulso de la innovación tecnológica, incluyendo avances en el ámbito de la robótica y la inteligencia artificial de empresas como los robots (ARI) de PAL ROBOTICS, una empresa del (@22) del Poble Nou, Barcelona y habitual del Mobile. El evento ha facilitado el desarrollo de tecnologías como los asistentes robóticos, que, mediante su despliegue en el proyecto piloto de teleasistencia avanzada, contribuyen al diseño de soluciones integradas para mejorar la vida de los ciudadanos. La llamada "inteligencia de las cosas" (IOT).

La concejal Marta Villanueva, concejal de salud, personas con discapacidad y estrategia contra la soledad; subraya la complementariedad del trabajo de los robots con el personal humano, afirmando que los ARI no reemplazan a los profesionales de la atención a domicilio, sino que proporcionan una valiosa herramienta adicional. Esta colaboración entre tecnología y humanos optimiza los recursos disponibles, garantizando una atención de mayor calidad a los usuarios.

Por otro lado, el despliegue de los robots también permitirá obtener datos clave sobre la viabilidad del proyecto. La recogida de datos sobre el funcionamiento de los ARI servirá para evaluar su efectividad y, si se demuestra que el modelo es exitoso, podría replicarse en otras áreas del país o en diferentes tipos de asistencia social. Con la posibilidad de ampliar el contrato hasta alcanzar las 1.000 unidades, este proyecto podría convertirse en un referente en el uso de la tecnología en el sector social, sentando un precedente para otros municipios o países que deseen mejorar la atención y el bienestar de las personas mayores mediante soluciones tecnológicas avanzadas.