Choque de competencias en Rodalies: ¿Estado o Govern?

Para empezar, una buena noticia: el lunes 17 quedaba desconvocada la huelga, hecho que parecía indicar el inicidio del buen funcionamiento. Pero la realidad es que ha habido altibajos.

Desde el robo de cobre en varias líneas hasta los problemas técnicos en las instalaciones de las estaciones, las incidencias se han sucedido a lo largo de los días, sumando indignación entre los pasajeros y aumentando la presión sobre las autoridades responsables. A continuación, se analiza en profundidad lo sucedido durante esta semana, con un enfoque en las causas, las soluciones ofrecidas y las últimas intervenciones.

Robos de cobre: el origen de los problemas

Uno de los principales problemas que ha marcado la semana en Rodalies Renfe ha sido el robo de cobre, un fenómeno recurrente que continúa afectando a la infraestructura ferroviaria de Catalunya. El lunes 17 de marzo, las líneas R14, R15, R16 y R17 fueron suspendidas entre Altafulla y Sant Vicenç de Calders debido a un robo de cobre en las instalaciones de la estación de Sant Vicenç de Calders. Este tipo de delito no es nuevo, ya que en el pasado se ha registrado una ola de robos de cables de cobre que afectan gravemente a la operativa de las líneas de Rodalies, provocando cortes de servicio y tiempos de reparación prolongados.

El impacto fue considerable, con miles de usuarios de la línea afectadas por el cierre de las estaciones, mientras que la Generalitat activaba medidas para paliar la situación. Durante el robo, se activó un servicio alternativo por carretera para los pasajeros, además de la prealerta del Pla Ferrocat, un protocolo de emergencia activado por Protecció Civil ante este tipo de incidentes.

Soluciones a medias y medidas de emergencia

Durante los primeros días de la semana, Adif y Renfe se enfrentaron a la ardua tarea de reparar las instalaciones afectadas. Técnicos de Adif trabajaron durante largas horas para restablecer el servicio, pero la solución definitiva tardó en llegar. Aunque se intentaron poner en marcha soluciones provisionales como la activación de servicios alternativos por carretera, la inestabilidad en la frecuencia de los trenes y la falta de transparencia sobre los tiempos de reparación generaron frustración entre los usuarios.

La interrupción de los servicios en varias líneas provocó una serie de manifestaciones a lo largo de Catalunya, en las que los pasajeros expresaron su malestar y exigieron soluciones urgentes. Estos incidentes no solo afectaron la comodidad de los viajeros, sino que también incrementaron la preocupación por la seguridad en las estaciones y la infraestructura ferroviaria.

El jueves 20 de marzo, la situación parecía mejorar, ya que la incidencia fue solucionada parcialmente. Las líneas R14, R15, R16 y R17 fueron restablecidas de forma progresiva, aunque los tiempos de espera seguían siendo elevados debido a los problemas técnicos en las vías y la infraestructura afectada. La rehabilitación de las estaciones afectadas, sin embargo, ha sido un proceso largo, con la mayor parte de las interrupciones resueltas en los días posteriores.

Intervenciones y nuevas medidas del gobierno

Ante la continua oleada de problemas, la Generalitat de Catalunya y el Ministerio de Transportes activaron nuevos protocolos de seguridad y reparación para minimizar el impacto de los robos y las incidencias en la red de Rodalies. Además de reforzar las patrullas de seguridad y la vigilancia en las estaciones más afectadas, el gobierno de la Generalitat anunció que se destinarían más recursos a la prevención de los robos de cobre, además de lanzar una campaña informativa para sensibilizar a los ciudadanos sobre los peligros de este tipo de actos delictivos.

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha pedido disculpas a los usuarios por la situación, pero ha pedido al Govern que "dé la cara" ante tal problemática. Ante tal escenario, la consellera de Territori, Sílvia Paneque pedía reclama más «colaboración política» para intentar resolver la avalancha de problemáticas que ha golpeado duramente el servicio de Rodalies.  «No podemos hacer otra cosa que no sea más trabajo y esfuerzo. Debemos trabajar para que la crisis se solucione, y también hemos trasladado con urgencia y contundencia al gobierno español, Renfe y Adif la necesidad de mejoras. Es inaceptable encontrarnos en esta situación».

Otras incidencias y soluciones

Además del robo de cobre, otras incidencias relacionadas con la infraestructura de Rodalies también han generado problemas esta semana. El jueves 20 de marzo, una nueva avería en el sistema de señales de la estación de Sants causó retrasos en varias líneas de Rodalies, afectando principalmente a las rutas que conectan la capital catalana con el resto de la región. A pesar de que la incidencia fue solucionada en pocas horas, los usuarios ya estaban acostumbrados a una semana de interrupciones continuas.

El viernes 21 de marzo, otro incidente menor afectó a la línea R3 entre Barcelona y Vic, aunque esta vez se trató de una avería en una de las unidades de trenes que, al igual que en el caso anterior, provocó una interrupción temporal del servicio.

Refuerzo de las medidas de seguridad y más vigilancia

Uno de los puntos críticos que se ha abordado tras estos episodios de inestabilidad es la necesidad de mejorar las medidas de seguridad en las estaciones de Rodalies. A raíz de los robos de cobre, que han sido una constante a lo largo de los últimos meses, la Generalitat ha reforzado las patrullas de Mossos d'Esquadra y ha pedido más colaboración con las autoridades locales. También se ha planteado la posibilidad de instalar cámaras de seguridad y barreras de acceso en las estaciones más vulnerables.

El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha pedido "calma" yestas no se deben, en ningún caso, a la falta de inversión por parte del Estado, sino todo lo contrario, a los problemas que generan las obras que se están realizando y las infraestructuras nuevas que dan problemas de juventud

Manifestaciones y reacciones de los usuarios

La indignación de los usuarios no se ha hecho esperar. En diferentes puntos de Catalunya, los viajeros de Rodalies han organizado manifestaciones y protestas, exigiendo respuestas y soluciones rápidas. Desde los vecinos de la Barceloneta hasta los usuarios de la línea R1 en el Maresme, las quejas se han multiplicado durante la semana.

Los usuarios piden un compromiso real por parte de Renfe y la Generalitat para acabar con las constantes interrupciones en el servicio. Además, muchos exigen que se aumenten las sanciones para los delincuentes que cometen robos de cobre y que se inviertan más recursos en la modernización de la infraestructura.

El sábado 22, ha habido manifestaciones en muchos puntos de Catalunya para expresar el malestar. Al mismo tiempo, se han producido más incidencias. Esta vez entre Torredembarra y Sant Vicenç de Calders, que ha interrumpido la circulación de hasta cuatro líneas, el R14, el R15, el R16 y el R17. La falta de inversión en el transporte público por parte del Estado castiga sobre todo a los usuarios de las comarcas del sur del país. La incidencia de este sábado se ha visto solucionada en torno a las 16.35 horas.

Síndic de Greuges

Desde el Síndic de Greuges se ha apuntado que habría que mejorar la información al usuario, un aspecto que en principio no tendría que requerir grandes inversiones económicas, teniendo en cuenta que los problemas graves no se podrán solucionar hasta que no se hagan las inversiones correspondientes. La consellera de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, Sílvia Paneque, ha sido este sábado que la raíz del problema es de una "desinversión" anterior, pero afirma que desde el Ejecutivo intentarán "mejorar la información" a los viajeros durante el año 2025, recogiendo la demanda del Síndic de Greuges.

Conclusiones y perspectivas de futuro

La crisis que ha vivido Rodalies Renfe esta semana no es un caso aislado, sino que responde a una serie de problemas estructurales que afectan tanto a la infraestructura como a la seguridad de las estaciones. Aunque las soluciones se están implementando de manera progresiva, los usuarios siguen demandando una respuesta rápida y efectiva que permita restablecer la normalidad en el servicio de trenes.

La clave para resolver esta situación no solo radica en la reparación de las instalaciones dañadas, sino también en la mejora de la seguridad y en la implementación de medidas más efectivas para prevenir los robos de cobre. Asimismo, la ampliación de los recursos destinados a Rodalies y el refuerzo de la colaboración entre las autoridades competentes son esenciales para garantizar que este tipo de incidencias no se repitan en el futuro.

Renfe refuerza la organización de Rodalies con dos perfiles expertos en operaciones y calidad del servicio

Renfe pone todo de su parte y ha nombrado a Josep Enric García Alemany como nuevo director operativo de Rodalies dentro del plan de acción que la compañía lleva a cabo desde hace semanas para mejorar el servicio en Cataluña. Es ingeniero conocido en Cataluña en el sector de la explotación y operación del transporte público y la movilidad sostenible. Además, tiene una amplia experiencia como consultor, formador y gestor de empresas de transporte. 

También ha nombrado a Uli Wessling Tolon como gerente de operaciones de Rodalies. Wessling es ingeniero de caminos, canales y puertos, con una trayectoria profesional avalada por su experiencia en el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) dónde ha desarrollado tareas de planificación en servicios integrados y multimodales de transporte público.

Los dos nombramientos vienen a reforzar la profesionalización y organización de Rodalies y se incluyen en el plan de acción iniciado por Renfe con medidas urgentes donde se incluyen actuaciones importantes estructurales y organizativas con el objetivo de mejorar sustancialmente la calidad del servicio actual.

Este plan incluye acciones de reorganización interna como mejoras en el centro de gestión -con refuerzo de personas, información y organización- que incidirá directamente en la resolución de incidencias y en la información al viajero. 

El objetivo es la mejora de la disponibilidad de la flota, el centro de gestión operativa y la calidad del servicio de las estaciones, en concreto en el que hace referencia a las instalaciones, mantenimiento e información. Sobre este punto, Renfe pone especial atención en la mejora de la información, y por eso reforzará el equipo que llevará a cabo un plan de choque que permitirá mejorar la interacción con las personas usuarias.