Las ferreterías catalanas agotan existencias a raíz del apagón: "No tenemos stock"

Algunas ferreterías catalanas han agotado las existencias de productos como radios, linternas, baterías, fogones de gas portátiles y pilas a raíz del apagón electrónico de este lunes: "No tenemos stock", coinciden en declaraciones a Europa Press tres de ellas.

Es el caso de la Ferretería La Comarca, situada en Montmeló (Barcelona), que después de vender una veintena de linternas, cinco cocinas de gas portátiles y todas sus pilas y bombonas de gas, admiten que se han quedado sin existencias de estos productos que sus clientes les siguen pidiendo.

"Formamos parte de la cooperativa Optimus y ni nosotros ni las otras 500 ferreterías españolas que forman parte de ella tenemos acceso a más material porque está todo agotado. Tenemos las estanterías vacías", explica el propietario del negocio, Josep Pont.

Una situación similar viven en la Ferreteria Robert Cardús de Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona), donde este lunes se vendieron una treintena de cocinas de gas portátiles, unas 120 linternas, cuatro radios y casi todas las pilas.

"La gente venía desesperada. No sabían cuánto duraría el apagón ni con qué podrían hacerse la comida", recuerda el propietario de esta ferretería barcelonesa, Robert Cardús.

Listas de clientes para futuros pedidos

La falta de stock provocada por el apagón ha obligado a las ferreterías a realizar pedidos para recuperar los productos que tenían en venta antes del incidente y satisfacer las demandas de algunos clientes que todavía les preguntan por materiales que les pueden ser útiles si ocurren episodios similares.

Así lo cuenta la titular de la Ferreteria Keerl de Barcelona, Marta Keerl, quien relata que la mañana del lunes se agotaron las doce radios que tenían en venta, así como las 150 linternas que tenían en sus estanterías.

"Por la tarde, hicimos un repuesto de linternas, que también se agotaron. Esta mañana también hemos hecho otro pedido que nos llegará este miércoles y para el que hemos hecho una lista de una veintena de clientes a los que llamar cuando llegue", apunta Keerl.

La ferretera asegura que quienes se movilizaron antes para adquirir materiales necesarios durante el apagón fueron los jóvenes de hasta 35 años, especialmente con la compra de radios: "Seguramente, a diferencia de los clientes más mayores, ellos no tenían estos productos en casa", puntualiza Keerl.