¡Catalunya respira aliviada! Los embalses superan el 71% y alejan el fantasma de la sequía histórica
Tras meses de restricciones y alarma, las lluvias de primavera obran el milagro: las cuencas internas alcanzan niveles no vistos desde hace años y permiten soñar con el fin de la emergencia hídrica
Catalunya está a punto de dejar atrás uno de los periodos de sequía más severos de su historia reciente. Según el último informe de la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), las reservas de las cuencas internas se sitúan este martes en el 71,1% de su capacidad, lo que supone una subida de casi dos puntos porcentuales respecto a la semana pasada. El dato es especialmente esperanzador si se tiene en cuenta que en marzo, antes del episodio de lluvias generalizadas, los embalses estaban en niveles críticos.
La lluvia de primavera, clave para la recuperación
Gracias a las abundantes precipitaciones registradas desde marzo, los pantanos han experimentado una recuperación constante. En total, las cuencas internas almacenan actualmente 494,3 hectómetros cúbicos de agua, frente a los 475 hm³ registrados hace apenas una semana.
Este repunte sostenido no solo mejora las perspectivas para el abastecimiento urbano, sino que también abre la puerta a una posible flexibilización de las restricciones de agua vigentes en buena parte del territorio catalán.
Embalses como La Baells o Sant Ponç, casi al 100%
El nivel de agua en los principales embalses catalanes evidencia una tendencia muy positiva. Por ejemplo:
- La Baells roza la plena capacidad con un 98,8%
- Sant Ponç alcanza el 87,8%
- Sau, uno de los más emblemáticos y que había sido símbolo de la sequía, ya está al 72%
- Susqueda, al 60,3%, mejora también notablemente
- El embalse de La Llosa del Cavall ha pasado del 63,8% al 67,3%
Incluso los más rezagados, como Siurana (25,5%) y Riudecanyes (59%), han registrado ligeras mejoras.
Barcelona y Girona, también aliviadas
Los embalses del sistema Ter-Llobregat, que suministran agua a Barcelona, su área metropolitana y Girona, han mejorado sensiblemente: se sitúan al 72,4% de su capacidad, con 443 hectómetros cúbicos, frente al 69,4% de la semana pasada. Esta cifra refuerza la esperanza de normalización para millones de personas.
¿Fin de la emergencia? La sequía pierde fuerza, pero no desaparece
Aunque las cifras actuales invitan al optimismo, las autoridades insisten en que hay que mantener una gestión responsable del agua. La sequía, aunque remite, no se ha terminado por completo, y es fundamental consolidar la recuperación con un uso sostenible de los recursos hídricos.
Aun así, después de meses de preocupación, cortes de agua y restricciones, Catalunya por fin ve luz al final del túnel hídrico. Si la tendencia continúa, el verano podría llegar sin los temidos escenarios de emergencia. Un respiro muy esperado para la ciudadanía, el campo y el medio ambiente.
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