Los Bombers apagan un fuego que ha calcinado 12 hectáreas en Bellpuig
El cuerpo avisó que habían logrado extinguir las llamas a última hora de la tarde del pasado jueves 18
Los Bombers de la Generalitat lograron apagar el incendio que quemó una superfície algo superior a las 12 hectáreas de un área agrícola en Bellpuig (Urgell), cerca del pantano de Seana, la tarde del pasado jueves 18 de julio.
El 112 había recibido el aviso cuando pasaban 15 minutos de las 6 de la tarde. Tras activar las 13 dotaciones de Bombers, se percataron que se había quemado rastrojo y cereal y los árboles de regadío de los alrededores no han prendido finalmente.
Aproximadamente una hora después de la llegada de los efectivos de los bomberos, 2 de las unidades pudieron regresar a las bases, puesto que el incendio ya estaba estabilizado.
El cuerpo ha anunciado que en las tareas de extinción también colaboraron efectivos de las Agrupacions de Defensa Forestal (ADF) y de los Agents Rurals.
Los Bombers, atentos por la imprevisibilidad de los fuegos
Hace días, el cuerpo alertó que el cambio climático provoca "incertidumbre y falta de predictibilidad" para trabajar en los incendios actuales, motivo por el que los efectivos se han formado y participan en proyectos europeos para intercambiar conocimientos.
Así se pronunció el subinspector jefe del Grupo de Actuaciones Forestales (Graf) de Bombers de la Generalitat, Edgar Nebot, que ha detallado que los incendios se pueden clasificar en distintos escenarios (o generaciones).
En algunos casos, el fuego empieza a propagarse por la masa forestal porque hay combustible que lo permite e incluso se mueven con el viento; otros fuegos necesitan ser analizados para entender cómo funcionan para que los Bombers los puedan atacar, y otros atraviesan zonas urbanas que se tienen que proteger.
"Con el cambio climático, empezamos a ver que para poder integrar ayudas de Aragón o Francia, necesitamos que los efectivos hablen el mismo lenguaje técnico, por lo que fomentamos intercambios", ha añadido.
Por ello, quiso dejar claro que la campaña forestal durante los meses de verano "no será una campaña continua, será intermitente", y que los incendios tendrán comportamientos intensos cuando haya episodios de viento o calor.
Ha explicado que, a principios y mediados de julio, esperan ver incendios en la zona del sur de Lleida y de Terres de l’Ebre, mientras que en Tarragona, en la provincia de Barcelona y la plana de Lleida la campaña "irá arrancando poco a poco, a medida que vaya entrando el calor o los episodios de viento".
En cambio, en las zonas de la Noguera y el Alt Urgell la campaña de incendios empezará a finales de julio, por lo que será una campaña "corta e intermitente".
Por último, Nebot ha detallado que la mejor manera de ayudar a los bosques para que estén sanos y no padezcan estrés por sequía o plagas es "haciendo una buena gestión forestal", con la ayuda de la administración forestal y el sector privado.
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