VÍDEO: Un desahucio en Barcelona acaba en 'huevazos' contra los Mossos
El Sindicat d'Habitatge del Raval no ha dudado en denunciar la actuación del PSC y la Generalitat
Este martes, la calle Arc de Sant Cristòfol, en el barrio de Santa Caterina de Barcelona, ha sido escenario de tensos enfrentamientos en el desahucio de Mariam y sus hijos, de cuatro y nueve años, que ocupaban de manera irregular un piso propiedad de la Generalitat.
La intervención ha comenzado a primera hora de la mañana, cuando decenas de vecinos y activistas se congregaron frente al edificio, ubicado en el número 6-8, para intentar frenar el desalojo. Durante la protesta, lanzaron harina, huevos y pintura contra los agentes de los Mossos d'Esquadra.
El Sindicat d'Habitatge del Raval denunció que, durante la operación, los agentes dejaron "inconsciente a una mujer de 70 años con problemas cardíacos", que tuvo que ser trasladada en ambulancia por el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM). A pesar de la resistencia, el desahucio se llevó a cabo horas después, tras la dispersión de los manifestantes por parte de la policía.
Según fuentes policiales, se realizaron tres detenciones por atentar contra agentes de la autoridad y varias personas fueron identificadas, incluyendo una mujer que requirió atención médica. Además, el Sindicat d'Habitatge del Raval ha informado que dos personas fueron atendidas en una ambulancia y una tercera fue trasladada al hospital.
El sindicato no ha dudado en denunciar la actuación del PSC y la Generalitat, destacando que el desahucio se realizó "solo tres días después de la manifestación del 23N" a favor del derecho a la vivienda. En redes sociales, señalaron que la resistencia vecinal "representa la dignidad de la clase trabajadora" ante lo que consideran "una agresión a las familias".
Por su parte, la policía ha explicado que su presencia respondía a una orden judicial y que estaban allí para apoyar a la comitiva judicial. Según fuentes policiales, durante la intervención se encontraron con una "resistencia activa" que incluyó la colocación de vallas para bloquear el acceso al inmueble. Además de los lanzamientos de harina y pintura, se denunciaron objetos contundentes arrojados contra los agentes.
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