Un trabajador se emborracha y agrede a cuatro ancianos de una residencia de Barcelona

La noche de Fin de Año, un trabajador de la residencia Gran Via Parc, ubicada en el barrio de Mandoni, en Barcelona, cometió presuntamente agresiones físicas a al menos cuatro de los residentes del centro, algunos de los cuales tienen 84 años. Los Mossos d'Esquadra están investigando el caso, que podría incluir además un posible delito de agresión sexual. El trabajador, de nacionalidad peruana y empleado en la residencia desde 2022, fue apartado de su puesto tras conocerse los hechos.

Según informan fuentes de ElCaso.cat, la agresión ocurrió en la madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero de 2025, cuando el trabajador, que estaba en su turno de noche, habría ingerido alcohol dentro del propio centro. Cuando llegó al trabajo, no se notaron señales de alteración, pero con la llegada de las compañeras que lo relevaban por la mañana, se descubrió que estaba extremadamente borracho y varios residentes relataron que él entró a sus habitaciones y los agredió físicamente, propinándoles golpes en la cara.

Los Mossos d'Esquadra recibieron las denuncias e inmediatamente comenzaron a investigar el caso. Los agentes están a la espera de analizar las imágenes de las cámaras de seguridad de la residencia, lo que podría permitir identificar más víctimas y, en particular, confirmar si hubo una agresión sexual a una residente de 84 años. La investigación está siendo llevada a cabo por la Unitat d'Investigació (UI) de la comisaría de Sants-Montjuïc de los Mossos. Hasta el momento, el trabajador no ha sido detenido, pero se espera que lo sea una vez se aclaren los detalles de las acusaciones.

Investigación en curso y medidas de la residencia

Como parte de la investigación, cuatro residentes fueron trasladados a un centro médico para realizarles pruebas y obtener informes médicos que apoyen la denuncia. Además, los Mossos han recogido testimonios de los compañeros de trabajo del agresor y están revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad para obtener más pruebas.

La dirección de la residencia, preocupada por el impacto de los hechos, se puso en contacto con las familias de los residentes afectados el mismo 1 de enero. También están evaluando la posibilidad de personarse como acusación particular en el caso, sumándose a las denuncias de las víctimas.

El agresor no recuerda los hechos

El trabajador implicado en las agresiones presentó un comportamiento incoherente debido a su estado etílico y no cumplió con sus funciones como cuidador. Aunque asegura no recordar nada de esa noche, el centro le ha comunicado que está apartado de su puesto hasta que se aclare lo sucedido. Por el momento, la dirección de la residencia está cooperando con las autoridades para resolver el caso y garantizar la seguridad y el bienestar de los residentes.