Trapero aparta a un agente de Mossos al considerar una "traición" que haya ayudado a Puigdemont

Josep Lluís Trapero, director general de los Mossos d'Esquadra, ha adoptado una posición firme ante la presunta implicación de tres agentes en ayudar a Carles Puigdemont a regresar al exilio tras su reaparición en Barcelona el 8 de agosto de 2024. Tres agentes, Jordi R., David G. y Xavi M., fueron suspendidos de empleo y sueldo mientras se llevaba a cabo una investigación interna. Además, enfrentan una causa penal por un posible delito de encubrimiento bajo la jurisdicción del juzgado de instrucción 24 de Barcelona. Así lo ha informado Vilaweb.

Trapero, quien calificó las acciones de los agentes como una "traición", decidió no archivar el expediente disciplinario de Jordi R. Este agente fue reasignado del centro penitenciario de Barcelona al aeropuerto de El Prat.

Entre las pruebas clave destaca el uso de un vehículo registrado a nombre de Jordi R., el cual supuestamente fue empleado para la fuga de Puigdemont. Jordi R. alegó que había intercambiado el coche con una amiga sin formalizar el cambio de titularidad. Sin embargo, esta explicación no ha convencido del todo a las autoridades.

Por su parte, David G. y Xavi M. también permanecen suspendidos, con recursos legales pendientes para intentar revertir la medida. Mientras tanto, sus defensas han cuestionado la coherencia de las versiones oficiales respecto a los objetivos de la operación de seguridad.

Incongruencias y contradicciones

La consellera de Interior, Núria Parlon, declaró en una respuesta parlamentaria que el objetivo de la operación era garantizar la seguridad y el orden público, omitiendo cualquier referencia a la detención de Puigdemont. Este punto ha sido explotado por la defensa de los agentes para intentar demostrar contradicciones en el caso.

Además, la defensa de Jordi R. solicitó que la cúpula de los Mossos d'Esquadra testificara para esclarecer los hechos. Sin embargo, la jueza a cargo del caso rechazó esta petición, lo que llevó al agente a abstenerse de declarar como estrategia de defensa.