Escándalo con la 'okupación' en Girona: la policía desaloja a una familia de su casa y permite la entrada de okupas
Los agentes advirtieron a los propietarios sobre una posible acusación de "violación de domicilio" si intentaban recuperar su vivienda por la fuerza
Un nuevo caso de ocupación ilegal ha generado controversia en Girona, Cataluña, afectando a Jordi Riera y su familia. La situación se desató cuando la policía desalojó a la familia Riera de su vivienda, permitiendo la entrada de ocupas. Los ocupas presentaron como prueba un video en el que se les ve cocinando con ollas dentro de la casa, mientras que los propietarios presentaron las escrituras del inmueble.
La reacción de la policía ha sido motivo de crítica, ya que advirtieron a los propietarios sobre una posible acusación de "violación de domicilio" si intentaban recuperar su vivienda por la fuerza. Los ocupas, algunos identificados con pasaportes marroquíes y otros con NIE, causaron ruidos nocturnos de golpes y demoliciones dentro de la casa, lo que incrementó la preocupación de la familia Riera.
El proceso burocrático ha sido lento. Aunque se presentó una denuncia, el juzgado no había recibido el atestado policial 24 horas después del incidente. El día designado para procesar ocupaciones es el miércoles, lo que añade más demoras al caso. La reacción de los vecinos ha sido de indiferencia o minimizando la situación con comentarios como: "Si no molestan, no será un problema".
Jordi Riera ha expresado una profunda sensación de desprotección y falta de apoyo institucional. Ha criticado la legislación actual, que a menudo resulta en la absolución de los acusados de ocupación sin que se devuelva la propiedad a los dueños legítimos. Ante esta situación, se ha hecho un llamado a una reforma que permita un proceso exprés para resolver casos de ocupación ilegal.
En las redes sociales, la familia Riera ha solicitado ayuda y sugerencias para recuperar su casa, lo que ha llevado a una movilización comunitaria. Grupos se están organizando para desalojar a los ocupas o protestar contra esta situación. Las deficiencias del sistema legal han sido destacadas, señalando que los derechos de los ocupas a menudo tienen prioridad sobre los de los propietarios.
Políticos de Junts y Aliança Catalana han mostrado su apoyo a Riera. Por su parte, el alcalde de Girona, Lluc Salellas, ha contactado a Riera para investigar la actuación policial y ha comenzado a redactar un protocolo sobre ocupaciones, buscando soluciones para estos casos que afectan a la comunidad.
Escribe tu comentario