Una niña de 12 años muere después de que sus padres traten sus heridas con batidos
La niña encontró que había recibido "lesiones graves que amenazaron su vida" en la noche del jueves 8 de agosto, cuatro días antes
Una niña de 12 años de Texas murió después de que su madre y su padrastro supuestamente no buscaron atención médica para sus heridas que amenazaban su vida, dijeron las autoridades el miércoles 14 de agosto.
Según un comunicado de la Oficina del Sheriff del Condado de Atascosa, la preadolescente, que era animadora en Jourdanton Jr. High School, murió el lunes 12 de agosto.
Una investigación iniciada por la División de Investigación Criminal de la oficina del sheriff poco después de la muerte de la niña encontró que había recibido "lesiones graves que amenazaron su vida" en la noche del jueves 8 de agosto, cuatro días antes.
“La investigación reveló que los padres no buscaron asistencia médica para la niña, a pesar de que estaba mental y físicamente incapacitada y no respondía. Parece que la madre finalmente llamó al 9-1-1 cuando la niña comenzó a tener problemas respiratorios”, se lee en parte del comunicado.
En una conferencia de prensa , el sheriff David Soward dijo que los padres “intentaron atenderla” en casa mientras “estaba inconsciente” y “probaron un par de remedios”, entre ellos tratar de darle un batido con algunas vitaminas. “Por supuesto, con alguien que está inconsciente, eso es difícil de hacer”, agregó Soward, quien luego identificó a la víctima como Miranda Sipps, quien cumpliría 13 años a finales de este mes.
“Básicamente pensaron que podrían curarla y no creemos que quisieran la atención que esto atraería si la niña resultaba herida, lo cual es extrañamente irónico, pero esa era su línea de pensamiento”, dijo.
Soward no entró en detalles sobre las lesiones de Sipps o cómo ocurrieron, admitiendo que "no está 100% seguro", pero dijo que ella "podía parpadear y mover un poco las manos" cuando las autoridades la alcanzaron, y agregó que también creía que los padres le consiguieron oxígeno en un momento.
La madre y el padrastro, identificados como Denise Balbaneda, de 36 años, y Gerald Gonzales, de 40, de Christine por la oficina del sheriff, fueron arrestados el 13 de agosto y enviados a la cárcel del condado de Atascosa.
Se les ha acusado de causar lesiones a un niño causando lesiones corporales graves por omisión, un delito grave de primer grado, según la oficina del sheriff.
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