Un pasajero borracho provoca que un avión tenga que desviarse para entregarlo a la policía
El británico pegó a miembros de la tripulación y escupió al resto de pasajeros
Un vuelo de Ryanair con destino a Ibiza tuvo que ser desviado a Toulouse (Francia) después de que un pasajero británico, en estado de embriaguez, provocara un gran altercado. El incidente se produjo cuando el hombre, tras consumir alcohol comprado en el aeropuerto, presuntamente agredió tanto a la tripulación de cabina como a otros pasajeros.
El vuelo FR2626, que había partido de Manchester a las 17:20 del domingo, transportaba a un grupo de turistas hacia la isla balear. Sin embargo, una hora después del despegue, el comportamiento descontrolado del pasajero obligó al avión a desviarse hacia Toulouse para entregar al individuo.
Según testigos, el hombre pasó el primer tramo del vuelo bebiendo y luego comenzó a discutir con un miembro de la tripulación, llegando a golpearlo en la cara. La situación rápidamente se intensificó, y el individuo también agredió a otros pasajeros y escupió a una mujer y la insultó.
La tripulación de cabina intentó contener al hombre y le advirtió que el vuelo sería desviado si no se calmaba. La respuesta del pasajero fue desafiante: "No me importa una mierda". El altercado duró aproximadamente 40 minutos hasta que el avión aterrizó en Toulouse. Allí, un grupo de 12 policías franceses se encargó de retirar al hombre y a su esposa, quien también participó en el incidente, acosando y golpeando a otro pasajero mientras bajaba del avión.
Ryanair, por su parte, ha compartido su versión de los hechos: "Este vuelo de Manchester a Ibiza (8 de septiembre) se desvió a Toulouse después de que un pequeño grupo de pasajeros causara problemas durante el vuelo. La tripulación pidió ayuda a la policía, que fue a buscar al avión al aterrizar en Toulouse y desembarcó a dos pasajeros antes de que el vuelo continuara hacia Ibiza.
Pedimos disculpas sinceras a los pasajeros por cualquier inconveniente causado como resultado del comportamiento indisciplinado de estos pasajeros, que estaba fuera del control de Ryanair.
Este asunto ahora es responsabilidad de la policía local”.
Este incidente no es aislado; de hecho, el comportamiento indisciplinado a bordo de vuelos comerciales es un problema creciente. La semana pasada, Michael O'Leary, director ejecutivo de Ryanair, sugirió limitar el consumo de alcohol a dos bebidas en los aeropuertos para frenar estos episodios. O'Leary afirmó que ahora, además del alcohol, muchos pasajeros mezclan pastillas, lo que conduce a un comportamiento más agresivo y difícil de controlar.
Ryanair también ha intensificado sus controles de equipaje de mano para evitar que los pasajeros introduzcan alcohol de contrabando en vuelos a destinos populares como Ibiza. Según O'Leary, los pasajeros han comenzado a utilizar "trucos de vida" para ocultar bebidas alcohólicas en botellas de agua o tazas de café.
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