Prisión para un expolicía que intentó matar a su expareja y su madre estrellando su coche

Un expolicía de 57 años, William McBurnie, ha sido condenado a prisión por intentar asesinar a su ex pareja estrellando su coche a gran velocidad contra la ventana de su negocio en Jedburgh (Escocia). El incidente, que tuvo lugar en diciembre de 2022, dejó heridas a su ex, Zoe Turnbull, de 44 años, y a su madre, Beverley, de 71 años, quienes quedaron aterrorizadas y se apartaron a tiempo para evitar que el coche acabara con sus vidas.

McBurnie estaba bajo los efectos el alcohol, y cuando se estrelló contra la ventana, rompió los cristales y destrozó el mobiliario del lugar. La violenta colisión dejó a las dos mujeres heridas y en estado de shock. Tras admitir el intento de asesinato en el Tribunal Superior de Livingston, McBurnie ha sido sentenciado a una larga condena en prisión. El juez, Lord Mulholland, calificó su acto como "cobarde y egoísta".

El agresor había estado bebiendo whisky desde las 6 a.m. el día del ataque. Conducía con un nivel de alcohol en sangre casi tres veces superior al límite legal cuando aceleró deliberadamente a través de una señal de ceda el paso y dirigió su vehículo hacia la tienda en Market Street. Su coche subió a la acera, atravesó jardineras y una ventana de cristal, dejando volar escombros y vidrios por todas partes.

McBurnie había estado acosando a Zoe Turnbull desde la ruptura de su relación, enviándole mensajes de texto, correos electrónicos y llamándola constantemente. Según declaraciones del fiscal Alex Price Marmion, había sido visto en repetidas ocasiones cerca de la tienda de Turnbull, lo que evidenciaba una conducta de vigilancia y acoso.

El ataque dejó a Zoe Turnbull con lesiones físicas y emocionales graves. Desde entonces, ha sido diagnosticada con trastorno de estrés postraumático y sufre pérdida de audición y problemas cardíacos derivados del trauma. Su madre también resultó afectada con problemas cardíacos y respiratorios.

El abogado defensor, Gareth Jones, alegó que McBurnie mostró "remordimiento genuino" por sus acciones, pero el tribunal consideró que el intento de asesinato fue premeditado y con la intención de matar. Turnbull ahora recibe apoyo legal para emprender acciones civiles por los daños sufridos, mientras McBurnie permanecerá en prisión cumpliendo su condena.