Una mujer encontró el cadáver de su marido desaparecido mientras buscaba los adornos de Navidad

La desaparición de Richard Maedge en abril de 2022 conmocionó a su familia y a las autoridades de Troy, Illinois (Estados Unidos). Tras enviar un mensaje a su esposa Jennifer diciendo que no se sentía bien y que volvería temprano a casa, no se supo más de él. Su coche apareció estacionado frente a su vivienda, pero no hubo más pistas. Después de meses de búsqueda, en diciembre de ese mismo año, Jennifer encontró el cuerpo de su esposo en un armario mientras buscaba adornos navideños.

El hallazgo fue impactante. Jennifer describió cómo descubrió a Richard: "Decidí poner el árbol de Navidad y, buscando una bolsa con adornos, lo encontré... Se había quitado la vida. Nunca imaginé que estaría ahí”. Este suceso desconcertó tanto a la familia como a las autoridades, ya que ni la policía ni los perros rastreadores encontraron indicios del cuerpo en los meses previos.

El armario donde fue encontrado Richard fue el único lugar en la casa que no había sido inspeccionado. Jennifer explicó: “Nunca pensé que él pudiera estar ahí”. En visitas anteriores, los agentes habían detectado un olor desagradable en la vivienda, que describieron como "de cloaca". Sin embargo, no hallaron nada sospechoso y atribuyeron el olor a problemas de fontanería, una suposición que Jennifer compartía.

La forense a cargo del caso explicó que el olor del cuerpo no se dispersó por toda la casa, lo que dificultó su localización. La distribución de la vivienda, sin sótano y con un espacio de acceso limitado, complicó aún más la búsqueda. Jennifer, por su parte, también mencionó que los múltiples olores generados por sus cuatro perros y un gato, sumados a sus problemas nasales, contribuyeron a que no notara algo fuera de lo común.

Este caso subraya lo impredecible de algunas tragedias y cómo, a veces, las pistas más evidentes pueden pasar desapercibidas.