Una pelea de comida, drogas y un final inesperado: la trágica muerte de un británico en un resort
Los resultados de la investigación apuntan a que Wright se desplomó tras una pelea de comida en el vestíbulo y, aunque inicialmente se pensó que podría haber sido víctima de una agresión, se concluyó que su muerte fue accidental
Dean Wright, un británico de 33 años originario de Newcastle, fue encontrado muerto en un carrito de equipaje en el lujoso hotel Riu de Cancún en diciembre de 2019. Cinco años después, una investigación en el Tribunal Forense de Newcastle ha arrojado luz sobre las circunstancias de su fallecimiento tras un altercado en el hotel.
Los resultados de la investigación apuntan a que Wright se desplomó tras una pelea de comida en el vestíbulo y, aunque inicialmente se pensó que podría haber sido víctima de una agresión, se concluyó que su muerte fue accidental.
Wright había viajado a México junto a su entonces novia, Rebecca Platts. Durante la madrugada del 14 de diciembre, él y Platts se encontraron con un turista estadounidense, y juntos consumieron cocaína en el hotel.
Rebecca se retiró antes a descansar mientras Dean continuaba en el bar del hotel, donde hubo una "pelea de comida", lo que llevó a Wright al baño para limpiarse, donde fue visto por última vez antes de su colapso.
Según el sargento Neill Jobling de la policía de Northumbria, Wright fue atendido por el personal de seguridad tras el altercado. Seis guardias de seguridad lo colocaron en un carrito de equipaje y lo trasladaron fuera del baño para intentar reanimarlo. Sin embargo, los esfuerzos fueron en vano y su muerte se confirmó en el lugar.
La investigación encontró alcohol y cocaína en el sistema de Wright, así como hematomas en su cabeza, torso y extremidades, que se atribuyeron a caídas accidentales más que a una agresión. La patóloga forense, Dra. Louise Mulcahy, señaló que Wright tenía un corazón agrandado y que la causa de muerte inicial, apuntada como un ataque cardíaco, fue descartada más tarde. Aunque tenía una lesión cerca del ojo, Mulcahy concluyó que pudo haber sido resultado de una simple caída.
Finalmente, la forense Karen Dilks dictaminó que la muerte de Wright fue accidental, poniendo fin a años de incertidumbre sobre el trágico suceso en Cancún.
Escribe tu comentario