Un padre agrede a dos árbitros juveniles durante un partido de hockey hielo en Estados Unidos
Irrumpió en la pista y empujó a dos árbitros menores de edad en un torneo juvenil de Seattle
El pasado domingo 9 de febrero, un incidente violento conmocionó a la comunidad del hockey juvenil en Seattle. Durante un partido en el Kraken Community Iceplex, un hombre identificado como Uriel Isaac Cortes Gonzalez, de 42 años, irrumpió en la pista de hielo y empujó a dos árbitros juveniles, de 12 y 14 años, quienes cayeron de espaldas. Como consecuencia, Gonzalez enfrenta dos cargos por agresión en cuarto grado, un delito menor. El incidente fue captado en video y compartido por la Pacific Northwest Amateur Hockey Association (PNAHA), generando una fuerte reacción de la comunidad.
Tras su detención, Gonzalez declaró que su acción fue motivada por la supuesta falta de intervención de los árbitros en una pelea donde su hijo habría sido golpeado y pateado durante 30 segundos. Sin embargo, testigos presenciales contradicen esta versión y afirman que la pelea entre jugadores duró aproximadamente 10 segundos antes de ser detenida por los mismos árbitros. Según estos relatos, Gonzalez ingresó al hielo gritando: "¡Quítate de encima de mi hijo!" y posteriormente empujó a los menores.
El acusado también aseguró que desconocía la edad de los árbitros, pero esto no evitó que las autoridades tomaran medidas en su contra. Tras abandonar el recinto antes de la llegada de la policía, fue detenido en un semáforo mientras viajaba con su esposa e hijo.
El Kraken Community Iceplex emitió un comunicado donde condenó el comportamiento del padre y anunció que queda vetado de las instalaciones de forma indefinida. Además, tanto la Pacific Northwest Amateur Hockey Association como USA Hockey han iniciado una investigación sobre lo ocurrido.
En respuesta al incidente, la comunidad del Jr Kraken lanzó una campaña en redes sociales llamada "Cool Down Challenge", cuyo objetivo es promover el respeto a los árbitros y fomentar la deportividad en el hockey infantil.
Jody Carpenter, presidente de la PNAHA, calificó lo sucedido como "inaceptable en el hockey" y realizó un llamado a padres y jugadores para que mantengan el respeto por los oficiales del juego. Por su parte, el Kraken Community Iceplex reiteró su postura afirmando que "no hay lugar en el hockey para este comportamiento".
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