La funeraria confunde los cádaveres de dos de las víctimas del kamikaze de Madrid

Un accidente trágico provocado por un kamikaze en la A-6, a la altura de Las Rozas (Madrid), terminó con la vida de tres personas y un insólito error en la identificación de los cuerpos. Las víctimas, entre ellas un policía nacional y su acompañante, fueron confundidas en el tanatorio, lo que provocó que casi incineraran a la persona equivocada. La investigación sigue abierta.

Un accidente que desata una investigación tras la confusión de cadáveres

El pasado domingo, un accidente en la A-6 en dirección a Madrid, causado por un kamikaze de 25 años que circulaba en sentido contrario, dejó tres muertos: el conductor del vehículo que circulaba en dirección incorrecta y dos hombres que viajaban en el coche impactado, uno de ellos un agente de la Policía Nacional, Alberto, de 44 años, y su acompañante, Juan Carlos, de 41.

Días después, la familia de Juan Carlos vivió un angustioso descubrimiento al identificar su cuerpo en el tanatorio. Su hermana insistió en ver el cadáver, a pesar de las recomendaciones, y descubrió que no era su hermano quien reposaba en el féretro, sino el policía Alberto. Esto ocurrió cuando ya estaban a punto de incinerar el cuerpo, según reveló El Mundo.

Una confusión que casi termina en tragedia

Al enterarse del error, la familia de Juan Carlos se puso en contacto con los familiares de Alberto, quienes confirmaron que el cuerpo del policía no estaba en el ataúd que se les había asignado. Tras alertar a las autoridades, la Guardia Civil y el Juzgado de Instrucción de Majadahonda asumieron la investigación de lo sucedido. Los cuerpos fueron trasladados de inmediato al Instituto de Medicina Legal, donde las huellas dactilares confirmaron las identidades correctas. A raíz de esto, el juez prohibió la incineración de Juan Carlos.

¿Cómo ocurrió la confusión?

Las primeras hipótesis apuntan a que el error se produjo en el etiquetado de los cuerpos por parte de la funeraria Parcesa, responsable de recoger los cadáveres. Sin embargo, la empresa aseguró en un comunicado que el error no fue suyo, alegando que solo se encargaron de la recogida judicial y que la identificación inicial la hicieron las autoridades, sin los documentos de identidad de las víctimas, como suele ser habitual.

Mientras la investigación continúa, los cuerpos ya han sido enterrados en sus respectivas localidades, Galapagar y Ávila, dejando tras de sí una polémica por el manejo de la situación.

Detalles del accidente mortal

El accidente tuvo lugar alrededor de las 6:30 de la mañana del domingo en el kilómetro 20 de la A-6, cuando el conductor del vehículo kamikaze circuló en sentido contrario por razones que aún investiga la Guardia Civil. El primero en casi ser impactado fue un agente de la Policía Municipal de Madrid, quien logró esquivar el coche, pero sufrió graves heridas al caer.

Pocos kilómetros después, el coche kamikaze chocó de frente con el vehículo en el que viajaban Alberto y Juan Carlos. Ambos murieron en el acto, al igual que el conductor del coche en sentido contrario. El hermano de este último, que lo acompañaba, fue hospitalizado en estado muy grave con traumatismo craneoencefálico.

La trágica colisión, sumada al error en la identificación de los cadáveres, ha dejado una investigación abierta y muchas preguntas sobre cómo se gestionó la situación tras el siniestro.