Servían palomas en vez de pato: horror tras el cierre de un restaurante chino en Madrid

La Policía Municipal de Madrid ha cerrado un restaurante chino en el distrito de Usera y ha imputado a su propietario por presuntos delitos contra la salud pública y contra la fauna y flora. El establecimiento, que estaba poniendo en riesgo la salud de los consumidores, ocultaba en su interior múltiples irregularidades y productos en condiciones insalubres, que incluyen palomas domésticas desplumadas presuntamente preparadas para ser servidas como pato laqueado.

La intervención tuvo lugar el 25 de marzo de 2024, cuando una inspección del local reveló una serie de problemas graves que iban más allá de las condiciones sanitarias. En primer lugar, se detectaron deficiencias en la cocina y un almacén oculto en el que se almacenaba más de una tonelada de carne y pescado en mal estado, sin etiquetado ni control de temperatura.

Palomas como pato laqueado y otros productos sin control sanitario

Lo más impactante fue el hallazgo de dos palomas domésticas desplumadas, que, según se sospecha, iban a ser cocinadas y servidas como si fueran pato laqueado, un plato típico de la cocina china. Además, se encontraron 184 unidades de gominolas en forma de pato, 184 envases de aditivos y colorantes chinos, bivalvos con cieno de origen asiático y especies de fauna protegida como pepinos de mar, cuyo consumo está prohibido por la legislación.

En la cocina, las condiciones eran igualmente preocupantes. Se encontraron sartenes oxidadas, acumulación de grasa en los suelos y fogones, y el sistema de evacuación de gases estaba improvisado. Los trabajadores no cumplían con las mínimas normas de higiene, manipulando alimentos sin guantes ni gorros. Además, el restaurante estaba infestado de cucarachas.

El dueño del restaurante ha sido imputado por delitos contra la salud pública al poner en riesgo la integridad de los consumidores, así como por la tenencia y posible uso de especies animales no autorizadas para el consumo humano. El restaurante ha sido clausurado de manera inmediata y los productos fueron precintados por el Departamento de Sanidad.

El caso ha sido trasladado a la autoridad judicial y al Ministerio Fiscal para su investigación, mientras la Policía Municipal continúa con las diligencias pertinentes. Este descubrimiento pone de manifiesto las graves irregularidades que se estaban llevando a cabo en un establecimiento que debería cumplir con los estándares de seguridad y salud pública.