Las duras palabras de Gonzalo Miró que ponen en jaque a Miguel Ángel Rodríguez y al PP

El tertuliano Gonzalo Miró ha encendido el debate en La Roca, el programa de La Sexta, tras referirse en duros términos a Miguel Ángel Rodríguez, el popular asesor de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. La controversia surgió después de que se evidenciara que Rodríguez estaba al tanto de la inminente imputación del fiscal general del Estado.

Miró no se contuvo y declaró: "Yo creo que ya llevamos demasiados lustros en este país sufriendo las artes políticas de Miguel Ángel Rodríguez como para entrar a sus trapos como miuras". Con esta frase, el tertuliano dejó claro su rechazo a entrar en los debates que giran en torno a la figura de Rodríguez.

En una crítica contundente, Miró afirmó: "Solo puedo decir que cuando el PP llegue al poder, que llegará, tarde o temprano va a llegar, y cuando se lo lleve muerto, porque se lo va a llevar muerto en camiones, nos estará bien empleado". Estas palabras reflejan su descontento con la situación política actual y su percepción sobre las consecuencias que esto podría tener para el futuro del partido.

El tertuliano continuó su diatriba asegurando que, en este país, cuando el líder del PP denuncia la corrupción, la reacción suele ser echar a quien denuncia en lugar de a quien comete el delito. "Aquí, en este país, cuando el líder del PP denunció la corrupción, a quien se echó del partido es al que lo denunció. Y en este caso, nos estamos aquí centrando en acusar al que investiga en lugar de centrarnos en el que la ha hecho", insistió, subrayando su preocupación por la falta de justicia y transparencia en el ámbito político.

Miró también se mostró escéptico ante la discusión sobre la imputación del fiscal general, afirmando: "A mí, como me parece de aurora boreal, me niego a entrar en el trapo de si está bien imputado o investigado... yo por lo menos. Habrá a quien gente a la que el debate en sí le guste, pero a mí sinceramente lo que me interesa es quién es el bueno y quién es el malo". Esta declaración resalta su deseo de enfocar el debate en las cuestiones fundamentales de moralidad y ética política, más que en las intrigas y acusaciones personales.