Vila y Coscubiela apuestan por "la moderación y las reformas" ante el conflicto catalán

 

Piden la libertad de los presos como incentivo para el diálogo: "Con gente en prisión no hay solución"

El exconseller de la Generalitat Santi Vila (PDeCAT) y el exdiputado del Congreso y del Parlament Joan Coscubiela (ICV) han apostado este miércoles por "la moderación y las reformas" para encontrar una vía dialogada al conflicto actual entre Catalunya y el resto de España.

Lo han dicho en un acto organizado por el Círculo de Economía 'Propuestas para un nuevo relato y un nuevo acuerdo', moderado por el presidente de la Fundación de la entidad, Antón Costas, quien ha destacado que en los tiempos que corren "hay que tener más coraje para ser moderado que para ser radical".

Santi Vila fue conseller del Govern de Carles Puigdemont y dimitió un día antes de que el Parlament declarara la república, mientras que Coscubiela fue diputado de SíQueEsPot en la anterior legislatura y participó en aquel polémico pleno del 27 de octubre.

Vila ha dicho que un principio de solución pasaría por emprender una conjunto de reformas, entre ellas convertir a España en nación de naciones y, a los soberanistas que le critican por proponer esto, replica: "Me dicen si no estoy escarmentado ¿Qué alternativa hay?", se ha preguntado.

Coscubiela ha lamentado que se ha instalado un conflicto que solo busca que haya vencedores y vencidos sin término medio, y ha concluido: "Cualquier intento de los moderados rápidamente recibe la descalificación de una campaña brutal de las divisiones mediáticas" de ambos bandos.

Vila ha expuesto que un primer paso para rebajar la tensión sería hacer practicable el 'terreno de juego', y esto pasaría porque el proceso judicial contra los políticos soberanistas "se liquide tan pronto como se pueda".

Coscubiela ha coincidido con Vila en cargar contra la cárcel preventiva contra los líderes soberanistas y ha advertido: "Con gente en prisión no hay solución".

Los dos han considerado que repetir elecciones en Catalunya sería un "desastre", pero han contemplado que el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont acabe apostando por jugar esta carta ante el veto del Estado a que vuelva a ser presidente.

"FUI RELEVADO POR UN CANTANTE"

Vila ha augurado que próximamente se creará un nuevo partido de tipo "liberal, progresista y de centro", que será inequívocamente catalanista pero no necesariamente con un componente nacionalista y, por tanto, no tendrá un estado catalán como último objetivo.

El exconseller ha explicado que la extinta Convergència convivían dos ánimas: una nacionalista y otra más liberal, centrista y progresista --él se ha inscrito en la segunda-- y ha concluido que estas dos ánimas colapsaron y "difícilmente se volverán a encontrar".

Ha dicho que el proceso soberanista es una variante catalana de otros fenómenos que se han creado contra la política tradicional como el ascenso de Donald Trump, la victoria de Macron y el Brexit, y ha expuesto que esta deriva ha llevado a la inclusión en las listas electorales de nombres inéditos.

Ha recordado que en las elecciones de 2012 él fue el líder de CiU en Girona, mientras que en las de 2015 la cosa cambió: "Fui relevado por un cantante", ha recordado, en alusión a que el líder de aquellos comicios en la provincia fue el cantautor Lluís Llach.

También ha retado a la ANC a, si quiere seguir influyendo en la política catalana, que decida dar el paso y se presente a las próximas elecciones: "Podría ser la evolución natural. Yo lo celebraría para que todos estemos en el mismo terreno de juego. (...) Que se concurra a cara descubierta".

"ABERRACIÓN JURÍDICA"

Coscubiela ha lamentado que ninguna de las partes enfrentadas ha hecho esfuerzos para desescalar el conflicto, y ha pedido a los soberanistas que admitan que su estrategia ha resultado errónea y al Estado que "no puede derrotar al movimiento independentista".

Además, ha considerado que las dos partes tienen que reflexionar sobre sus errores, y para Coscubiela uno de los principales del independentismo fue aprobar la ley de transitoriedad jurídica: "Es la aberración jurídica más grande que ha aprobado nunca un órgano democrático".

Coscubiela ha dicho que hay riesgo de cronificación del conflicto catalán y también una degradación del lenguaje: "Ahora todo son golpes de estado, todo es violencia, todo es terrorismo, todo son presos políticos y esto supone una degradación de la democracia".