La Generalitat insta al Ayuntamiento de Terrassa a que cumpla la ley en su injustificada remunicipalización del agua
La Dirección General de la Administración Local advierte de que el proceso de municipalización del agua -que ahora se encuentra en su última fase- requiere de un informe de la Autoritat Catalana de la Competència. El Consistorio egarense quita hierro al asunto.
El Ayuntamiento de Terrassa hace mucho que hace lo que le viene en gana sin atenerse a las consecuencias. Es el caso de su aventura injustificada de la remunicipalización del agua.
Tras varios avisos desoídos, ahora la advertencia viene directamente de la Generalitat. La Dirección General de la Administración Local ha avisado al Consistorio egarense que el proceso de remunicipalización del agua -que ahora se encuentra en su última fase- requiere de un informe de la Autoritat Catalana de la Competència (Acco).
Así se lo ha trasladado con una carta, en la que ha señalado que la finalización de este procedimiento, en régimen de monopolio mediante el sistema de prestación libre, para estar adecuado a la normativa "correspondería solicitar un informe a la Acco y posteriormente a la Comisión Jurídica Asesora".
Se trata de un escrito que ha "constatado" que el consistorio vallesano ha finalizado esta municipalización del agua por libre, sin llevar a cabo las acciones pertinentes.
No es la primera vez que el Ayuntamiento de Terrassa hace caso omiso a los requerimientos. El pasado marzo la Acoo advirtió al Consistorio de que pidiera el informe perceptivo para seguir adelante con el proceso de cambio de forma de gestión del servicio de abastecimiento de agua en el municipio.
Mina, Aguas de Terrassa solicitó una mediación en el Ilustre Colegio de Abogados de Terrassa con la voluntad que interceda en las cuestiones objeto de controversia y que intente buscar un entendimiento entre el Ayuntamiento de Terrassa y la compañía, ante la preocupación de que el expediente para la nueva forma de gestionar el agua pueda no ser ajustado a derecho, con las incertidumbres jurídicas que esta situación conlleva.
Mina quiere evitar que un posible litigio jurídico, afecte de forma negativa a toda la ciudadanía de Terrassa, sus intereses y los de los trabajadores.
La fiebre por la remunicipalización del agua -por motivos puramente ideológicos- contradice la opinión de los ciudadanos de Terrassa, que valoran como el mejor servicio público el suministro del agua, según los datos publicados por el Observatorio de Estudios de Servicios Urbanos (OSUR). El 68% de los egarenses están satisfechos con este servicio que lleva Mina, Aigües de Terrassa.
EL CONSISTORIO QUITA IMPORTANCIA AL AVISO
Fuentes del Ayuntamiento de Terrassa han afirmado que responderán a la "carta informativa", ya que han considerado que se trata de una misiva y no un requerimiento, asegurando que de momento no hay ningún servicio establecido y tampoco ningún monopolio.
Las mismas fuentes han defendido que en el documento no se plantea la opción de presentar un recurso, un aspecto que refuerza el carácter "informativo" del escrito, a la vez que han tachado de falsa la información sobre la que se fundamenta la argumentación de la Dirección General de la Administración Local.
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