La entidad Arrels atendió a 1.183 personas sin techo durante el último año

 

La entidad Arrels ha atendido a 1.183 personas sin techo en su centro abierto de Barcelona en los últimos 12 meses, la mayoría de los cuales buscaban servicios higiénicos y asesoramiento sobre los recursos existentes en la ciudad para personas sin hogar.

Arrels ha informado este jueves en un comunicado de que se trata tanto de personas solas como en pareja y con niños, que viven ya en la calle o están pendientes de ser desahuciados, y que en su mayoría (el 88%) son hombres de entre 35 y 54 años (el 47,5%).

La entidad ha afirmado que la mayoría de personas atendidas han contactado con servicios sociales, pero que no han encontrado la respuesta que necesitan, y la responsable del centro abierto de Arrels, Marta Maynou, ha explicado que el acceso a la vivienda "no aparece como necesidad de la gran parte de atendidos" porque la gente suele pedir primero servicios básicos.

Maynou ha expuesto que los servicios de ducha y de consigna para personas sin hogar son insuficientes en Barcelona, a diferencia de otros servicios como los comedores sociales, los cuales solo suponen un 8% de las demandas debido a su fuerte presencia formal e informal en la ciudad.

Desde Arrels se quejan de que muchas de las personas que acuden a ellos en busca de ayuda "están a tiempo de vincularse a la red pública de recursos", pero que para que lo consigan son necesarias más políticas preventivas que eviten los desahucios y un refuerzo de los servicios sociales ofertados por los entes públicos que facilite el acceso a los mismos.

Por último, la entidad ha advertido que, a corto plazo, en Barcelona es necesario ampliar el servicio de duchas y flexibilizar sus normativas, habilitar consignas donde las personas sin hogar puedan dejar sus pertenencias y abrir espacios de acogida nocturnos y de baja exigencia en cada barrio, mientras que a largo plazo, se necesitan medidas que faciliten a estas personas el acceso a pisos de protección oficial sin estar condicionados por la falta de recursos económicos.