El AMB aprueba impugnar "in extremis" las cuentas de 2017 de Aigües de Barcelona

En la reunión del consejo metropolitano, Alberto Fernández (PP) ha cuestionado la doble vara de medir del AMB, que critica la falta de provisiones en el presupuesto de la empresa pese a que la misma área metropolitana tampoco los contempla.

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Edifici Aigües de Barcelona a Collblanc

 

Edifici Aigües de Barcelona a Collblanc


Fue el tercer punto en la reunión del Consell Metropolità de l'Àrea Metropolitana el pasado 26 de febrero, pero la obsesión con el servicio de agua del AMB viene de lejos. Desde que Colau llegó a la alcaldía de Barcelona, los 'comuns' han intentado por todos los medios propagar su idea de que la gestión del agua solo puede ser pública.


Pese a los resultados positivos en eficiencia, compromiso social, precio y otros parámetros de Aigües de Barcelona, Empresa Metropolitana de Gestió del Cicle Integral de l'Aigua, el gobierno del AMB --formado por el PSC y el grupo Entesa, que integra las "fuerzas del cambio" de los municipios metropolitanos-- decidió el pasado martes impugnar por la vía judicial ante los tribunales mercantiles los presupuestos de 2017 de la empresa mixta.


En concreto, la propuesta salió adelante con los votos favorables de PSC y comuns, que tienen mayoría simple, más el voto positivo de la CUP y la abstención del resto de grupos (PP, Cs, PDeCat y los representantes de Torrelles y Barberà).


Para avalar esta iniciativa, el AMB esgrime su carácter de socio en la entidad (ostenta un 15% de participación) y el voto contrario a las cuentas anuales de 2017 que presentó en el consejo de administración de la empresa el representante del área metropolitana.


La sociedad mixta está participada en un 70% por Aigües de Barcelona, en un 15% por el AMB y en otro 15% por Criteria, y realiza la gestión eficiente del ciclo integral del agua, desde la captación hasta la potabilización, transporte y distribución, además del servicio de saneamiento y depuración de aguas residuales.


EL PP DENUNCIA EL DOBLE RASERO DE LA IMPUGNACIÓN


El único político que alzó la voz de un modo claro contra la impugnación --pese a abstenerse en la votación-- fue Alberto Fernández (PP), que criticó que esta medida llegase en la "foto finish" del calendario de acciones judiciales, que según denunció está a punto de terminar.


Además, Fernández declaró que no se habían dado suficientes motivos que justificasen la impugnación y que el AMB exhibía una doble vara de medir al criticar las cuentas de la empresa públicoprivada.


En concreto, el AMB reprocha a Aigües de Barcelona que no haya provisionado fondos para la multa que debería pagar si se declara nula la constitución de la empresa, asunto que está pendiente de resolver en el Tribunal Supremo.


El político 'popular' ha cuestionado esta justificación de la demanda porque no tiene noticia de que el AMB, socia al 15% del operador, haya realizado ninguna provisión para responder solidariamente de esta eventual condena.

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