Torra arenga a los empresarios a defender "un referéndum" de independencia

 

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, se ha topado con un ambiente de indiferencia y resignación contenida en la apertura de la XXXV Reunión del Círculo de Economía. Torra llegaba a territorio inhóspito un año después de asumir el Govern para hacer un balance de su primer año de mandato, pero ha dedicado su discurso a mitinear sobre la independencia como suele hacer en otras ocasiones.

Torra ha reclamado al empresariado catalán que se sitúe en "la primer fila de la defensa de la calidad democrática de las instituciones, de lo que quiere el 80% de la ciudadanía catalana: un referéndum" de independencia.

El presidente catalán ha criticado la judicialización contra el proceso soberanista, y ha advertido de que "el único camino de estabilidad posible" es defender que la sociedad catalana es madura para decidir su futuro debatiendo, hablado y, finalmente, votando.

En ese sentido, Torra ha anunciado que la semana que viene se dará a conocer una "noticia" que confirmará el liderazgo de Catalunya en el sector de la nuevas tecnologías y la sociedad del conocimiento, sin dar más detalles.

Sin embargo, el discurso del presidente ha sido recibido con una frialdad generalizada. Mientras Torra enlazaba ideas generales sobre los retos de la digitalización o el mantenimiento del Estado del Bienestar, un auditorio medio vacío se lo escuchaba con resignación y sin ánimo.

LOS CAMBIOS DE SEDES SOCIALES NO IMPORTAN...

Torra ha indicado que el movimiento de sedes sociales se ha invertido y que más empresas con sede social en Madrid la han trasladado a Catalunya que no a la inversa durante el cuarto trimestre de 2018 y el primero de este año: "¡Quién lo iba a decir!".

Esta ironía parecía dedicada a una parte del propio empresariado, que durante los últimos tiempos ha lanzado advertencias sobre el daño que el procés podría llegar a causar sobre la prosperidad de Catalunya. "Parece, por lo tanto, que se consolida la inflexión en el fenómeno del que se habló tanto, aquella famosa 'huída de empresas', y que se utilizó tanto por parte de ciertos medios con una clara intención de manipular el relato", ha razonado.

... PERO SÍ EL DÉFICIT FISCAL

No obstante, Torra ha alertado del "lastre inmenso" que supone el déficit fiscal para Catalunya, además de no poder gestionar infraestructuras como el Corredor Mediterráneo y los puertos y aeropuertos, y ha asegurado que funcionarían mejor si se hiciera desde la Generalitat.

"En la gestión de las infraestructuras nos jugamos una buena parte del éxito del futuro", ha razonado Torra, y ha ejemplificado el perjuicio competitivo que supone que, por ejemplo, Seat no disponga del Corredor Mediterráneo.

Con este ejercicio de victimismo económico, Torra ha redondeado una intervención donde han predominado los eslóganes mitineros del independentismo en vez del análisis sosegado y con vistas al futuro de la economía catalana. El Torra activista ha vuelto a comerse al Torra president (si es que hay uno).