​Crisis en la Asociación de Futbolistas Españoles tras la guerra por los horarios de los partidos

 

La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) se enfrenta a una posible ruptura poco después del conflicto entre la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) con la Liga por los horarios de los partidos, que tras la resolución judicial podrán jugarse en viernes pero no en lunes.

Hasta ahora, la AFE había permanecido unida pero ahora existe división entre los colaboradores del actual presidente, David Aganzo, y los cercanos a su antecesor y actual responsable de la RFEF, Luis Rubiales.

Tradicionalmente, había buena relación entre Aganzo y Rubiales, pero en enero las cosas se enfriaron debido al enfrentamiento entre la Federación y la Liga por la celebración de la Supercopa, y posteriormente se congelaron aún más con la guerra de los horarios futbolísticos.

La Liga de Futbol Profesional, presidida por Javier Tebas, envió una carta al sindicato AFE advirtiendo que si no jugaban los partidos pactados perderían hasta un 30 por ciento de los derechos audiovisuales, a la vez que también se verían afectados los salarios de los jugadores.

Fuentes del sector aseguran que el círculo próximo a Rubiales busca una moción de censura contra Aganzo con el fin de tener asegurados los votos de los jugadores en las elecciones a la Federación en 2020. Otras voces afirman que Rubiales no tiene nada que ver con la revuelta interna y que no se posiciona.

Coincidiendo con la batalla por los horarios entre Tebas y Rubiales, varios directivos y delegados de la AFE han presentado una demanda contra Aganzo para exigir su dimisión por presuntas irregularidades.

Los demandantes sostienen que Aganzo ha puesto en marcha un Comité Ejecutivo que manejaría el sindicato en paralelo a la Junta Directiva.