Iglesias exigió la colectivización de la economía para afrontar el coronavirus

La exigencia del vicepresidente segundo chocó con la posición de la ministra de Economía, Nadia Calviño, que amenazó con dimitir si se tomaba el control de las eléctricas y los medios de comunicación.

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El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 de España, Pablo Iglesias, minutos antes de intervenir en el acto 'Reaccionarismo y fascismo en el siglo XXI' en e

 

La comparecencia de Pedro Sánchez se retrasó durante horas el pasado sábado. El motivo: un Consejo de Ministros convulso por las exigencias de Iglesias de tomar el control de la industria eléctrica y de los medios de comunicación.


Ante la excepcionalidad de la situación, el vicepresidente segundo pidió la colectivización de sectores económicos clave, lo cual provocó el enfado de la titular de Economía, Nadia Calviño, que llegó a amenazar con dimitir si se tomaban estas medidas. Entre ambos, un Sánchez perplejo intentaba mediar en una crisis que por momentos lo dejó paralizado.


Según informa 'El Economista', la crisis del coronavirus ha destapado la división escondida tras la aparente unidad del gabinete. Los ministros de Podemos exigen más medidas de intervención sobre la actividad económica, así como una mayor protección de los trabajadores. Sin embargo, Economía y Hacienda quieren ir con cautela a la hora de realizar actuaciones que podrían ralentizar el crecimiento español y provocar un serio desajuste en las cuentas públicas.


El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 de España, Pablo Iglesias, minutos antes de intervenir en el acto 'Reaccionarismo y fascismo en el siglo XXI' en el Salón de actos de la Facultad de Ciencias Políticas y



Como corolario de este enfrentamiento, se encuentra la decisión de Sánchez de apartar a cualquier ministro morado de la Autoridad Competente que va a gestionar el país durante el periodo de estado de alarma. Pese a que Podemos cuenta con una representante que podría formar parte del mismo --la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz--, Sánchez no se ha querido pillar los dedos y ha confiado en los "ministros de Estado" para capear esta crisis.

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