El pacto de Gobierno con Bildu provoca la primera gran crisis entre el PSOE y Podemos

 

El miércoles en la sesión de control del Congreso para prorrogar una vez más el estado de alarma, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció que Bildu votaría a favor de la moción de los socialistas. Las declaraciones del presidente llegaron incluso antes de que el partido independentista vasco anunciara su posición. 

El Gobierno consiguió el "sí" de Bildu prometiendo la derogación "íntegra" de la reforma laboral del año 2012 "impulsada por el partido popular", según reza el documento firmado por los independentistas vascos, el PSOE y Unidas Podemos. 

Sin embargo,  han bastado sólo unas horas para que el PSOE de marcha atrás. El partido ha emitido un comunicado donde descarta la derogación integra de la Reforma Laboral, anunciando que sólo se modificarán tres aspectos de la misma: la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad, las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo y la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales. 

CRISIS ENTRE EL PSOE Y PODEMOS

El giro de los socialistas no ha gustado nada al partido liderado por Pablo Iglesias. "Voy a ser cristalino: pacta sunt servanda (lo firmado obliga)", ha asegurado el presidente de Podemos en una entrevista en Catalunya Radio, recogida por CatalunyaPress, en la que se ha mostrado muy duro con la rectificación realizada por los socialistas a última hora de este miércoles. 

"Cada partido podrá decir lo que quiera. Pero los documentos firmados en el acuerdo entre tres grupos parlamentarios ese es el acuerdo. Luego que cada partido quiera hacer consideraciones, muy bien, pero lo firmado es eso", ha recordado.

Asimismo, Iglesias ha cargado contra CEOE y Cepyme después de que hayan expresado este jueves su "rotundo" rechazo al citado acuerdo. "Creo que a nadie le puede sorprender que la patronal quería un gobierno del PP y Vox. Es normal. Pero tienen que entender que hay algo que es la soberanía popular", ha sostenido.