ERC insiste en “consensuar” una fecha electoral con Torra
El pacto entre ERC y el Gobierno para facilitar la sexta y útima prórroga del estado de alarma ha vuelto a tensar al máximo las costuras del gobierno catalán.
Con ERC exhibiendo músculo y recuperando cierta posición preferencial en el Congreso por el acuerdo sobre el Estado de Alarma con el Estado, la guerra entre los socios del gobierno catalán se recrudece.
En esta situación ERC exige consensuar una fecha electoral antes de que venga dada por el Tribunal Supremo y su posición sobre la inhabilitación de Torra, mientras que JxCat da un sonoro portazo y avisa a través de Carles Puigdemont " si el independentismo no se reconoce capaz de ir juntos, tendremos que explicar a la gente que no seremos independientes", lanzó ayer el expresident en un dardo directo a ERC en las redes sociales llamando a la "unidad".
Ante la sentencia del Tribunal Supremo sobre la inhabilitación de Quim Torra prevista para los próximos meses, el president anunció que disolvería el Parlament y convocaría de forma oficial elecciones una vez aprobados los presupuestos en la cámara, una promesa enterrada por la crisis sanitaria actual.
En plena desescalada, JxCat busca ahora alargar al máximo la legislatura, liderar las críticas contra el Gobierno de Pedro Sánchez, presumir de gestión al frente de la Generalitat y dejar a ERC en manos de las consejerías más peliagudas (Salud y Educación). Una estrategia que choca frontalmente con los republicanos, que pidieron pactar un calendario electoral y llegar a las urnas "por consenso y no fruto de una ruptura". La prioridad ahora es superar esta situación de emergencia y poner las bases de la reconstrucción que tiene que venir.
"Llegar a una cita electoral con un calendario pactado y consensuado nos hace ser más fuertes", advirtió Vilalta antes de reiterar que desde ERC no quieren que el Tribunal Supremo "vuelva a interferir en la agenda catalana" y fije la fecha de las elecciones.
Mientras desde desde JuntsxCatalunya echan balones fuera a la crisis actual dentro del Govern y niegan una convocatoria electoral inminente, facultad única del president de la Generalitat. "¿El Govern tiene diferencias? Es obvio, no lo negaré. Pero son diferencias legítimas porque es un gobierno de coalición", aseguró la portavoz del Ejecutivo, Meritxell Budó, despejando de nuevo el horizonte:"«No es el momento de hablar de elecciones. No se puede abordar esta crisis con un Govern en funciones, con un proceso electoral convocado".
Escribe tu comentario