Protesta de Residencias 5+1 en Sant Jaume para exigir una vida digna en los centros sociosanitarios
La Coordinadora quiere que la Generalitat garantice la buena calidad de vida de los ancianos ingresados.
La Coordinadora Residencia 5+1 ha exigido a la Generalitat y a todos los partidos políticos con representación en el Parlament que adopten las medidas necesarias para garantizar una buena calidad de vida de las personas mayores que residen en los centros de asistencia.
La coordinadora ha llevado a cabo una concentración en la plaza de Sant Jaume para protestar por la situación en la que se encuentran muchas de las residencias públicas para personas mayores. Una situación que llevan denunciando desde hace años y que se ha visto seriamente agravada durante la pandemia, cuando centenares de ancianos han muerto por falta de una atención adecuada y ha quedado patente la grave situación por la que atraviesan muchas residencias públicas.
Los miembros de la coordinadora consideran que es urgente que las administraciones competentes adopten las medidas necesarias para garantizar una buena calidad de vida de los ancianos que viven en las residencias y que ejerzan una vigilancia efectiva para que todas las partes implicadas en el cuidado de estas personas cumplan con todos los requisitos legales para evitar situaciones de maltrato y desamparo que se han venido denunciando.
La coordinadora resume en cinco puntos sus principales propuestas para los responsables de la administración: no cubrir todas las plazas que han quedado vacantes por el fallecimiento de muchos ancianos hasta que se pueda garantizar que en todos los centros haya habitaciones individuales para todos los residentes; establecer una ratio de un cuidador por cada cuatro pacientes para garantizar que las personas son atendidas adecuadamente; dotar a las residencias del equipamiento médico mínimo imprescindible para poder atender las necesidades más urgentes de los mayores; supresión de los actuales servicios médicos en las residencia públicas y su sustitución por la atención médica directamente desde los centros de atención primaria; y revertir la privatización de la gestión de residencias para acabar con la especulación que afecta a la calidad de los cuidados que reciben los ancianos.
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