¿Asistimos a un Juego de Tronos soterrado por la sucesión de Pablo Iglesias en Podemos?
El sector de Irene Montero, pendiente del "caso Dina" no está dispuesto a ceder el cetro a Yolanda Díaz, cuyo protagonismo y proyección empieza a ser molesto entre los miembros de las altas esferas moradas.
Sectores de la cúpula morada afines a Irene Montero actúan para evitar que Yolanda Díaz se convierta en la referente del partido morado. Ya asistimos a lo que se califica en los burladeros madrileños, como una "pela de lobas" épica, dadas las filtraciones y sospechas que vuelven a sacudir el ecosistema de Podemos.
Varias fuentes de Podemos aseguran que entre Irene Montero y Yolanda Díaz existe un importante alejamiento tras los desfavorables resultados de las elecciones gallegas. El "batacazo electoral" ha sido de órgado y en el ambiente se respira una justificada preocupación. Los ministerios en España no son vitalicios y Podemos vino a asaltar los cielos.
Los "monteristas" han iniciado una ofensiva contra la ministra Díaz y la señalan sin complejos como una de las responsables de la debacle de las elecciones gallegas, pero en Podemos creen que esa polémica esconde una maniobra para convertirse en la alternativa a Iglesias si éste acaba imputado en el caso Dina y tenga que hacerse a un lado de la primera linea política. Algo que empieza ser muy real en las filas moradas.
En la valoración de ministros, Yolanda Díaz, obtiene mucho mayor puntuación que su otrora amiga feminista Irene Montero. Por lo que su imagen es mejor en clave interna para liderar Unidas Podemos. Montero, en cambio, tiene la puntuación más baja, según el CIS de marzo cocinado por Tenazos a fuego lento. Dicen, que a veces las cosas tardan, pero que acaban llegando en plato "frío". La fulgurante carrera política de la Ministra de Igualdad, algunos opininan dentro de Podemos, empieza un rápido declibe, dado que la sombra alargada del caso Dina también la salpica y de lleno.
Fuentes cercanas a Díaz niegan tajantemente que ella esté interesada en liderar Unidas Podemos y restan importancia a que en octubre se diera de baja de IU por desaveniencias con su líder Alberto Garzón. Las mismas fuentes un "enfrentamiento abierto" con Iglesias, aunque si afirman que hubo choque con Montero.
Con respecto a Irene Montero hay comentarios de todo tipo, algunos hablan de “celos” de la ministra de Igualdad hacia Díaz. Montero se quejaba de que su ministerio tenía pocas competencias y que sufría las presiones de las feministas. Exigía más visibilidad para hacer frente a la popularidad de la ministra de Trabajo y parece ser, que pidió comprar trajes de chaqueta parecidos a los de la ministra gallega.
Dentro de Podemos algunos ya se alinean con Yolanda Díaz porque creen que la cúpula quiere “quemar” la figura de la ministra de Trabajo, para evitar que se postule para liderar la formación morada en el futuro. De esta manera ya hay distracción para rato porque entre las filas moradas necesitan como el vivir tener siempre "un enemigo interno" al que flagelar para no hablar de las decisiones desacertadas de la cúpula de Iglesias al mando de Podemos desde su creación y que están conduciendo al partido a la irrelebancia a pie de calle.
“Dina ha creado un agujero que no se va a poder resolver al haber dinamitado con sus múltiples versiones sobre el robo de su móvil las tesis defendidas por Podemos sobre las "cloacas" del Estado. El juez García Castellón puede acabar pidiendo al vicepresidente explicaciones sobre la retención de la tarjeta de Dina Bousselham e imputarlo por destrucción de pruebas y delito informático.
Además la Fiscalía Anticorrupción de Madrid investiga la relación entre la abogada de Podemos, Marta Flor, y el fiscal Ignacio Stampa. Si la Fiscalía decide mirar a fondo el asunto, podría crearse otro agujero, pero en todo el proceso del caso Villarejo.
En el ambiente morado se empieza a hablar de la sucesión de Pablo Iglesias, e Irene Montero, lleva años trabajando activamente para hacerse con el partido morado, porque de ese poder depende su presente y futuro profesional. Por eso su corte de afines no quieren perder ni un metro de ventaja, frente a Díaz. Ahí la "sororidad podemita" desaparece. Aquí hay mucho en juego y todas las armas están permitidas para ganar en el ruedo del lodo morado.
Este es el nuevo capítulo de entretenimiento del Juego de Tronos podemita de esta serie interminable, hasta que la gente corriente les retire su confianza en las urnas, algo que por lo que parece está más cerca que lejos para cerrar un círculo de promesas de cambios que llevará por delante la esperanza e ilusión de muchas generaciones , sobre todo de las futuras, que ahora en plena adolescencia y con derecho a un voto futuro se miran a los morados con mucha distancia.
Las hemerotecas son el mejor escudo de Yolanda Díaz para protege del "fuego amigo" de Irene Montero. Aunque está claro que Díaz con sus origenes gallegos tienden a transitar en la política hasta el día de hoy como las anguilas en los rios revueltos. Es decir, se mueve como pez el agua y siempre cae de pie. En esta ocasión, Montero se enfrenta no a una igual sinó a un hueso duro de roer con unos dientes muy desgastados. Sinó, tiempo al tiempo y palomitas.
Seguiremos informando.
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