Los trabajadores del 112 siguen en huelga mientras que Interior "echa balones fuera"

@EP

Los trabajadores del 112 siguen en huelga. Desde el 21 de agosto, los empleados que trabajan respondiendo las llamadas del Servicio de Emergencias de Catalunya en Reus y la Zona Franca están en paro indefinido para reclamar mejoras laborales y la internalización del servicio por parte de la Generalitat. Lejos de resolverse el conflicto, "el Govern todavía no ha hecho un solo movimiento para contactar con la plantilla e interesarse en encontrar una solución", ha denunciado este lunes en un comunicado el Comité de Huelga por CCOO.

Por su parte, el consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, ha declarado el mismo lunes en El Matí de Catalunya Ràdio que aún no ha tenido una reunión con los trabajadores, "porque en estos momentos están hablando con la empresa". El caso es que los empleados del 112 desde mayo están subcontratados por Ferrovial porque la compañía asignada anteriormente, Grupo Norte, entró en concurso de acreedores. Así, desde un primer momento la Generalitat ha querido que los trabajadores primero hablaran con la empresa con el fin de encontrar una solución.

Ahora bien, Ferrovial -según explican los gestores de emergencias- lo está poniendo difícil, "incluso a la hora de acordar el funcionamiento de la misma huelga, porque se están detectando varias irregularidades". El pasado 31 de agosto el comité ya denunció a la compañía en Inspección de Trabajo por falta de información y obstrucción de tareas de los representantes de los trabajadores en el marco de la huelga indefinida.

Los empleados, sin embargo, apuntan que "en última instancia la problemática del 112 es estructural, y por tanto no es Ferrovial quien debe solucionar, sino la Generalitat de Catalunya, responsable última del servicio".

ELENA SE COMPROMETE A TRATAR LA PROBLEMÁTICA

El consejero de Interior, preguntado en Catalunya Ràdio sobre la situación que se está viviendo en el 112, ha afirmado que "hay un debate de fondo sobre si se tiene que externalizar o se tiene que internalizar. El Govern se comprometió a analizar el 012 y los teléfonos de emergencias para ver si es posible internalizar el servicio". Elena ha matizado que "en este acuerdo no estaba el 112, pero es evidente que se siente interpelado. Si los otros servicios telefónicos se internalizan, este seguramente también se vería implicado".

Aunque el responsable de Interior no ha concretado el futuro del servicio, lo cierto es que a principios del año que viene está previsto que haya una nueva licitación, pero los trabajadores reclaman que no se convoque y se los absorba dentro la administración. "Si hasta ahora no se ha hecho nada, ha sido por falta de voluntad política o por desidia. Nosotros estamos dispuestos a seguir poniendo las cosas fáciles", ha manifestado David Vilaplana, miembro del comité de huelga por CCOO.

Elena, en conversación con los trabajadores a la salida de su intervención en Catalunya Ràdio, se ha comprometido a hablar con el nuevo Secretario General de Interior, Oriol Amorós, "durante los próximos días", y a tratar la situación cuando se designe un nuevo director del 112, que actualmente está en funciones.

RECLAMAN UN CONVENIO PROPIO

Las peticiones del comité son de base. Lo que exigen, principalmente, es no regirse por un convenio de "Call Center" y que se aplique uno de propio, ya que el trabajo que hacen no se ajusta a lo que se refleja en el acuerdo laboral.

Su tarea, explican desde el comité, es atender las llamadas de la ciudadanía que sufre una situación de riesgo y alertar a los equipos de emergencias. En este sentido han destacado que actuar con rapidez es fundamental "para poder salvar vidas" y que, a veces, sufren angustia y problemas psicológicos derivados de la atención de las llamadas. Además, han expuesto que pueden llegar a tramitar hasta 200 expedientes en cada turno de ocho horas y que no tienen "ni un segundo de descanso" entre llamada y llamada, lo que a su juicio evidencia que falta personal.

Actualmente en el 112 trabajan unas 230 personas y la Generalitat decretó un 85% de servicios mínimos. Esto está suponiendo que haya entre cuatro y seis personas menos por turno -de unas 30 personas cada uno-, y que se dejen de atender un 20% de las llamadas. Desde el comité de huelga han afirmado que no la desconvocarán hasta que Interior asuma compromisos por escrito.