La Fiscalía pide hacer una prueba de ADN a una supuesta hija de Salvador Dalí

La Fiscalía ha solicitado al Juzgado de Primera Instancia número 11 que acuerde la práctica de una prueba biológica en el Instituto Nacional de Toxicología para esclarecer si Pilar Abel es hija del pintor Salvador Dalí.

En un informe, al que ha tenido acceso Europa Press, el Ministerio Público explica que se pronunciará sobre el fondo de la demanda de paternidad presentada por esta mujer de Girona contra los herederos del genio de Figueres cuando se obtenga el resultado de la prueba genética y sea "el momento procesal oportuno".

"El fiscal interesa la práctica anticipada de prueba pericial biológica que deberá ser realizada por el Instituto Nacional de Toxicología, apercibiendo a las partes de que en caso de negarse a la realización de dicha prueba, será de aplicación lo dispuesto en el artículo 767.4 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, así como la doctrina establecida por el Tribunal Constitucional", recoge el escrito.

Este precepto, junto a la doctrina fijada por el Alto Tribunal en 1994, permite a los jueces reconocer la filiación de una persona aunque su progenitor se niegue a someterse a un análisis de ADN, siempre y cuando haya otros indicios que corroboren esa relación.

El fiscal Alberto Cobo solicita también la respuesta de los padres de la demandante que figuran en su inscripción de nacimiento y, en el caso de que hayan fallecido, de sus legítimos herederos.

El Juzgado de Primera Instancia número 11 de Madrid admitió a trámite el pasado abril la demanda de esta catalana, que también se dirige contra el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas en caso de que el pintor ampurdanés hubiera dejado como heredero al Estado y contra la Fundación Dalí por administrar su patrimonio.

"UN IDILIO DE JUVENTUD"

En la demanda presentada en los juzgados de Plaza de Castilla, la mujer dirige la acción civil contra el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas en caso de que el pintor ampurdanés hubiera dejado como heredero al Estado y contra la Fundación Dalí por administrar su patrimonio.

La demandante, que pide se reconozca a Dalí como su progenitor y se inscriba la sentencia en el Registro Civil, relata que nació el 1 de febrero de 1956 fruto de un idilio en la juventud de su madre, Antonia, con el artista en Port Lligart, con quien esta "mantuvo una relación de amistad que se convirtió en un amor en la clandestinidad y dio lugar a su nacimiento".

Según su escrito, su madre le reveló su origen en presencia de varias personas, incluyendo a una cuidadora que lo hizo constar en un acta notarial. Tras ello, ella se puso en contacto con el que fuera biógrafo, representante personal y fotógrafo de Dalí y juntos acordaron practicar una prueba de ADN para esclarecer los hechos.

La supuesta hija ilegítima envió a este hombre una muestra genética y restos de una "máscara 'post mortem' que le fue entregada y que contendría cabellos y piel" de Dalí. Sin embargo, nunca recibió el resultado de ese análisis genético.

Por todo ello, su defensa, ejercida por el abogado Francesc Bueno, solicitó al juzgado que curse una comisión rogatoria a Francia con el fin de que remita los resultados de la prueba de ADN y, en caso contrario, que el Instituto de Medicina Legal compruebe la relación paterno-filial entre ambos.