La huelga de transportistas podría "paralizar la industria española y la distribución de productos esenciales"

La huelga indefinida de transportistas convocada por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte, una asociación minoritaria de trabajadores, parecía que iba a tener un impacto mínimo. Sin embargo, el empeño de este grupo de transportistas ha conseguido poner en peligro la cadena de suministro española. 

Transportistas realizando un piquete @ep

Desde el inicio de la huelga, la plataforma ha realizado piquetes que el Gobierno español ya ha descrito como "actos violentos que impiden que otros trabajadores puedan ejercer su derecho a trabajar". Y es que a pesar de que el seguimiento de la huelga es bajo, porque las asociaciones mayoritarias de trabajadores del transporte se han desmarcado, están consiguiendo tener un impacto mayúsculo. "En algunos casos están dando como consecuencia que podamos quedarnos desabastecidos de algunos alimentos o de algunas mercancías importantes para el sector primario", ha dicho este miércoles la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez. 

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española - constituida por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (ASPAPEL), la Federación Empresarial de la Industria Química Española (FEIQUE) , la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), la Agrupación de fabricantes de cemento de España (OFICEMEN) y la Unión de Empresas Siderúrgicas (UNESID)- ha denunciado que hay "graves problemas en el funcionamiento de las industrias debido a la situación que se está produciendo en nuestro país con motivo del paro en el sector de transportes". La asociación que agrupa al conjunto de los sectores industriales españoles alerta de "la imposibilidad material de acceso a puertos y fábricas" debido a "acciones de sabotaje", una situación que podría dar lugar a "la paralización de la industria y de la distribución de productos esenciales a los ciudadanos".

Por ello, la organización que representa a los sectores estratégicos españoles pide "la intervención urgente de la Administración, y en particular del Ministerio del Interior, para garantizar el respeto a la actividad empresarial voluntaria y a la libre circulación de mercancías". Del mismo modo, apelan " a la responsabilidad, para que el paro en el transporte no implique la obstaculización de la producción".

INDUSTRIAS PARADAS 

La industria láctea española paralizará su actividad desde este jueves. Las fábricas han visto interrumpido el suministro de los insumos necesarios para la elaboración de productos lácteos y también el traslado del producto terminado a las cadenas de distribución, por lo que se ha anulado la capacidad de envasado y de almacenamiento y gestión de un alimento que es altamente perecedero y esencial para el consumo diario.

Según Fenil, que integra a más de 60 empresas del sector y representa más el 95% de la producción nacional de productos lácteos, esta paralización está acarreando consecuencias sociales, económicas y medioambientales "inevitables", ya que supondrá la suspensión de la recogida de la leche en las explotaciones ganaderas desde hoy y, sobre todo, pone en riesgo el abastecimiento de productos como la leche y los lácteos.

La federación ha señalado que este panorama es el resultado del "desamparo y la impotencia" de los transportistas ante la actuación de los mal llamados piquetes informativos que han bloqueado su actividad. Fenil ha subrayado que solo se revertirá esta decisión si se garantiza el derecho a la movilidad y la seguridad de los transportistas que no han secundado la huelga, y se evitan conflictos de orden público en las carreteras españolas, circunstancia conjugable con el respeto del derecho de huelga.

Pero también se han producido parones en otros sectores. La dirección de la siderúrgica ArcelorMittal ha anunciado que detiene parte de su producción por el impacto de la huelga de transportes. En concreto, la compañía afincada en Asturias detiene las instalaciones acabadoras de Finishing "debido a la falta de suministros".

En un comunicado, la dirección asegura entender los problemas que afectan al sector del transporte, pero ha subrayado que este conflicto "viene a agravar un escenario ya de por sí muy complicado debido a los desorbitados precios de la energía eléctrica y la incertidumbre económica derivada de la invasión de Rusia a Ucrania".

En Galicia, organizaciones agrarias y cooperativas han alertado de los problemas que acarrea para el campo gallego el paro en el transporte, ya que la industria dejará de recoger leche desde este jueves, 17 de marzo, al tiempo que se viven "dificultades" para abastecer a supermercados de carnes --como pollo y cerdo-- y productos de huerta.

Tras dejar claro que se muestran "comprensivos" con el derecho a huelga de los transportistas, ha reclamado que se cumplan con los servicios mínimos de recogida de leche y alimentos perecederos. Explica que ganaderías intensivas de cerdos y pollos están al "límite de no tener alimentación" para los animales. También en el caso de los rumiantes hay problemas con la llegada de materia primas para la fabricación de piensos. "Hay zonas donde ya hay problemas de abastecimientos", dice Roberto García sobre la falta de materia prima para esos piensos necesarios en unas 2.500 granjas de cerdos, conejos y pollos.

EL DESABASTECIMIENTO SE EMPIEZA A NOTAR EN MERCABARNA

Aunque el seguimiento de la huelga de transportistas en Catalunya es menor que en otras partes de España, ha empezado a afectar a sectores como el de la alimentación, por la dependencia de otros territorios de España. Según informa un mayorista de Mercabarna a 3/24, está faltando pescado que viene de Galicia y del Cantábrico, y también de la costa catalana. 

El producto que se ha visto más afectado es el pescado. La conjunción del temporal, la huelga de transportistas y el alto precio del combustible ha hecho que la llegada de este producto baje sustancialmente en Mercabarna, que intenta rellenar la carencia a base de importación. 

Del mismo modo, empieza a escasear la fruta y la verdura: los mayoristas siguen recibiendo manzanas de l'Empordà por el bajo seguimiento de la huelga en Catalunya, pero tienen serios problemas con las naranjas de Valencia o las fresas de Huelva. Un mayorista de verduras explica al 3/24 que el domingo no descargaron ni el 20% de las mercancías habituales para este tipo de productos.