Suspenso para Comín en la gestión de su primer verano al frente de Salut

 

Toni Comín, conseller de Salud

CatalunyaPress.- Ineficacia, ineptitud e inutilidad. Son las tres palabras que podrían describir la gestión de Toni Comín en su primer verano al frente de la conselleria de Salud. Los colectivos en pro de una sanidad pública han suspendido, de manera contundente, la labor del conseller.

Por un lado destaca la "mala planificación" de la asistencia primaria para atender a los turistas y, por el otro, el cierre de camas hospitalarias, según la portavoz de la Federación de Sanidad de CC.OO, Maria Àngels Rodríguez.

Las listas de espera no han disminuido tampoco, pese a que Comín se comprometió a ello. Desde Dempeus per la Sanitat Pública aseguran que este verano ha sido "bastante peor que los anteriores".

Esta precaridad no afecta por igual a todas las zonas, siendo las más pobres las más afectadas. Por poner un ejemplo, en el barrio Progrès-Sant Roc, uno de los más pobres de Badalona, se programó la consulta a un paciente que presentaba un cuadro febril para al cabo de 26 días, según ha informado 'Economía Digital'.

FALTA DE FACULTATIVOS

Además, desde los colectivos destacan que la falta de médicos se está cronificando paulatinamente en Catalunya. Así por ejemplo el pasado 30 de agosto la ausencia de facultativos fue notable en el Camp de Tarragona, pues no hubo médicos en las bases medicalizadas de Reus y Tarragona al menos durante el turno de mañana, según informa 'Diari de Tarragona'. Así, para atender a un hombre con parada cardiorrespiratoria en Torreforta se activó el VIR con base en Coma-ruga. Este paciente tuvo que esperar diez minutos para ser atendido.

SITUACIÓN LÍMITE

Además, la situación en los hospitales públicos este agosto ha sido caótico. Horas de espera interminables y pacientes que han tenido que aguardar tirados en los pasillos ha sido el escenario habitual de este verano. En el Vall d'Hebron, por ejemplo, se han registrado una media de 52 pacientes diarios esperando ser ingresados. Por su parte en el Parc Taulí (Sabadell), se cerraron la mitad de las 135 camas previstas y en los pasillos de urgencias han esperado una media de alrededor de 20 pacientes cada día.

¿Qué hacía Comín mientras tanto?