Torrent, optimista: ''Tras Chery llegarán más empresas chinas a Cataluña''

El conseller de Empresa i Treball de la Generalitat, Roger Torrent, ha augurado que tras la llegada de Chery, que la semana pasada firmó un acuerdo con la empresa Ebro para producir vehículos en la Zona Franca de Barcelona, "en el futuro inmediato aterrizarán en Cataluña otras empresas chinas".

En una entrevista, el responsable de la conselleria también ha indicado que se "está trabajando con 600 proyectos de potencial inversión en todo el mundo" y ha afirmado que el proceso de alguna de las inversiones va muy bien.

Ha valorado que "un punto a favor para el aterrizaje de Chery" fue que ya había una empresa catalana implantada y que al ser los primeros fabricantes chinos que desembarcan en Europa, ha hecho más fácil --textualmente-- que lo hagan junto a un socio local.

Al preguntársele por las alternativas contempladas por Chery, ha dicho que Cataluña competía con "varias ubicaciones en Europa, además de Italia", y ha destacado que el hecho de que acabasen escogiendo a la comunidad evidencia que es una zona competitiva.

Ha sostenido que en el proceso han sido imprescindibles el impulso a políticas industriales, en sus palabras, constantes y estables. "Cuando hablamos con potenciales inversores se lo explicamos, como prueba de que en este país apostamos, desde el consenso, por la industria. Es lo que quieren oír", ha asegurado.

1.250 nuevos puestos de trabajo

La alianza Chery-Ebro en Barcelona creará 1.250 nuevos puestos de trabajo y la meta es alcanzar las 150.000 unidades producidas para el año 2029, según se anunció el pasado viernes 19 de abril. 

El acuerdo establece la creación de una joint venture entre EV Motors y Chery, que contempla el inicio del ensamblaje de vehículos de la marca Omoda, propiedad del grupo chino, en la planta barcelonesa a partir de finales del verano.

Además, se tiene previsto comenzar la producción de dos modelos de la marca Ebro, propiedad de EV Motors, en el último trimestre de este año.

Este acuerdo representa un hito significativo en la industria automotriz catalana y española y marca un nuevo capítulo en la colaboración entre empresas locales y extranjeras en el sector.