Puigdemont apuesta por la vía unilateral y aparta de su camino al Pacte Nacional pel Referèndum

 

JxSí y la CUP han emprendido la directa y ya ni escuchan al resto de partidos ni a los miembros de la sociedad civil catalana que no piensan como ellos. La prueba definitiva ha sido la última reunión del Pacte Nacional del Referèndum en el que su presidente, Joan Ignasi Elena, y los siete miembros más que integran el Comité Ejecutivo han anunciado este martes que dejan sus respectivos cargos ahora que pasarán a ser un mero instrumento para el debate.

Minutos más tarde ha quedado claro el motivo. El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado que apuesta por la continuidad del Pacte Nacional pel Referéndum que demanda una consulta pactada con el Estado, pero ha precisado que esto no por eso renunciarà a la vía unilateral.

Unas palabras que parecían hacer alusión a las últimas declaraciones de Elena quien, hace pocos días, había mostrado su voluntad de seguir la vía del diálogo con el gobierno.

Puigdemont ha explicado que apuesta porque el Pacte no se disuelva, ya que no cerrará la puerta a negociar con el Estado hasta el último momento, pero ha mantenido que esto no frena la vía unilateral y anunciará la fecha y la pregunta de la consulta en "los próximos días".

"No cerramos la puerta a la negociación con el Estado, pero esto no frena la acción del Govern", ha asegurado el presidente catalán, que ha recordado las varias negativas que ha recibido en los últimos días del Gobierno central, entra ellas una carta del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

En alusión al espacio político de los 'comuns', que lideran Xavier Domènech y Ada Colau, Puigdemont les ha advertido de que el Pacte no nació para "cambiar el Gobierno del Estado", ni para pedir a nadie que renuncie a sus opiniones.

DIMISIÓN EN BLOQUE

Pocos minutos después de empezar la reunión del Pacte Nacional pel Referèndum para plantearse su futuro tras la negativa de Rajoy a celebrar un plebiscito pactado, todo el comité ejecutivo en bloque ha presentado su dimisión.

Lo ha explicado uno de los asistentes a la reunión que el Pacte celebra en el Parlament, el diputado de SíQueEsPot Joan Josep Nuet, en un apunte en Twitter: "Dice Joan Ignasi Elena que la Comisión Ejecutiva del Pacte hoy lo deja, lo que no significa que el Pacte no siga".

Además de Elena, formaban parte de este Comité Ejecutivo el exdiputado de ICV en el Parlament Francesc Pané; la exalcaldesa socialista de Badalona Maite Arqué, y la exconcejal del PSC en Barcelona Itziar González.

También la exconsellera de CiU en los gobiernos de Pujol Carme-Laura Gil; el exdiputado de ICV en el Parlament Jaume Bosch; la exdiputada de ERC en el Parlament Carme Porta, y el director de la revista 'Catalan International View', Francesc de Dalmases.

EL PACTE, POR EL DIÁLOGO

Antes de disolverse, el comité ejecutivo del Pacte Nacional pel Referèndum ha presentado una declaración institucional que pide que la plataforma no se disuelva y continúe como "plataforma de debate" de los partidarios de una consulta acordada con el Estado.

Esta declaración, que se ha debatido en la reunión del Pacte, también insta a la Generalitat y al Estado a "continuar buscando los caminos del diálogo necesario".

La declaración institucional mantiene también su defensa del referéndum sobre el futuro político de Catalunya porque "la mayoría del pueblo de Catalunya ha expresado reiteradamente su voluntad de decidir sobre los vínculos políticos de su nación a través del voto".

Esta declaración va acompañada de una memoria de 44 páginas de todas las actividades del Pacte, como la recogida de medio millón de firmas a favor de un referéndum pactado entre la Generalitat y el Estado.

La declaración considera que los partidarios del referéndum deben seguir buscando el diálogo pese a "la inflexibilidad y el rechazo mostrado por el Gobierno del PP y por la mayoría parlamentaria que le da apoyo" en el Congreso.

"Lo que reclama Catalunya es una oportunidad histórica que, resuelta democráticamente, tiene que honorar a los estadistas que lo hagan posible", concluye el documento, que reivindica el Pacte como instrumento de consenso en la política catalana.

También advierte al Estado de que sería "un error histórico" cerrarse definitivamente a cualquier pacto sobre el referéndum, pero evita en cualquier caso expresar su apoyo por el referéndum unilateral que quiere impulsar el Govern.

Por su parte, desde el Govern, se ve compatible seguir con la organización de un referéndum unilateral, con el mantenimiento del Pacte como instrumento que insista en la apuesta por que la consulta sea acordada con el Estado.

LA REACCIÓN DE LOS PARTIDOS

Todos los partidos integrantes del Pacte han coincidido en que la plataforma debe continuar, pero tienen visiones diferentes sobre qué debe hacer y, además, tampoco tienen un posicionamiento común sobre la vía unilateral.

Por ejemplo, el diputado de la CUP Benet Salellas quiere que el Pacte se mantenga como plataforma que impulse un debate ciudadano sobre el 'sí' y sobre el 'no' a la independencia antes del referéndum que la Generalitat prevé convocar tras el verano.

El coordinador de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, ha considerado básico que el Pacte se mantenga para conseguir un referéndum "efectivo y con garantías" y ha destacado que esta consulta suscita apoyos en el resto de España.

El secretario general de Podem Catalunya, Albano-Dante Fachin, ha defendido que el Pacte debe continuar para "responder a los ataques del PP" al derecho a decidir aprovechando su pluralidad, ya que considera que el Gobierno del PP está aumentando el tono contra el soberanismo.

El diputado de JxSí Lluís Llach ha asegurado que su grupo mantiene la intención de negociar el referéndum con el Estado pero avisa de que, si esto no se produce, apuesta por el referéndum unilateral "buscando nuevos espacios de democracia".