Militares franceses se niegan a rescatar a inmigrantes que se estaban ahogando en el mar

Oficiales de la marina francesa han sido acusados de negligencia tras negarse a rescatar a 60 inmigrantes en dificultades en aguas francesas del Canal de la Mancha. En lugar de intervenir, las autoridades pidieron ayuda a la Fuerza Fronteriza del Reino Unido, dejando que el bote abarrotado y lleno de agua continuara su peligrosa travesía, según publica Daily Mail. 

El incidente, que tuvo lugar en la madrugada de hoy, ha generado indignación después de que testigos informaran que la marina francesa escoltó el barco durante cuatro horas antes de entregarlo a las autoridades británicas cerca de Dover. Durante ese tiempo, los inmigrantes –en su mayoría hombres– fueron vistos gritando "¡ayuda!" y agitando las manos desesperadamente hacia los barcos franceses.

Francia ignora los llamados de auxilio

A pesar de saber que la embarcación estaba haciendo agua, las autoridades francesas optaron por no intervenir. En una conversación de radio que se pudo escuchar en el sistema público marítimo, un funcionario francés informó a la Fuerza Fronteriza británica sobre la situación y pidió asistencia. Sin embargo, la respuesta británica solicitó que Francia lanzara su propia lancha para evaluar la situación antes de intervenir.

Al final, la marina francesa escoltó el barco hasta aguas británicas, donde la Fuerza Fronteriza del Reino Unido finalmente recogió a los inmigrantes y los llevó a Dover. Un testigo describió el suceso como "un servicio de taxi completo", criticando la falta de acción por parte de Francia.

Crisis migratoria en aumento

Este incidente se produce en un momento en el que la crisis de los cruces ilegales por el Canal se intensifica. Según cifras recientes, 3.224 inmigrantes han llegado al Reino Unido en lo que va del año, un 8% más que en el mismo período de 2024. Desde que Keir Starmer asumió el poder, 26.466 personas han cruzado el Canal, con un promedio de 55 al día.

Solo en los primeros cuatro días de marzo, 1.168 inmigrantes han realizado la peligrosa travesía, incluyendo 326 personas en seis botes solo el día de ayer. Se trata de la primera vez en el año que se registran más de 1.000 llegadas en menos de una semana, según datos del Ministerio del Interior británico.

Reacciones y medidas gubernamentales

Un portavoz del Ministerio del Interior británico reiteró el compromiso del gobierno para frenar estos cruces ilegales: "Todos queremos poner fin a los peligrosos cruces en pequeñas embarcaciones, que amenazan vidas y socavan nuestra seguridad fronteriza. No nos detendremos ante nada para desmantelar las redes de traficantes de personas y llevarlos ante la justicia".

Mientras tanto, la marina francesa no ha emitido comentarios oficiales sobre su actuación en el incidente. La polémica sigue creciendo, con llamados a una mayor cooperación entre Francia y Reino Unido para abordar la crisis migratoria en el Canal de la Mancha.