Aumenta el empleo precario

 

Cáritas Diocesana de Barcelona ha alertado de que a pesar de la aparente mejora del mercado laboral, la situación "empeora" para las personas más vulnerables, que siguen sin poder salir de la precariedad, por lo que ha realizado una acción simbólica en los búnkers del Carmel, con motivo del Día internacional de las personas trabajadoras el 1 de mayo.

Con unas siluetas sin cara contrapuestas al 'skyline' de la ciudad han querido dar visibilidad a los colectivos que sufren más precariedad laboral, como los mayores de 55 años, los jóvenes y las madres con hijos, que sufren despersonalización y quedan "invisibilidazos ante los poderes públicos y la sociedad", ha explicado en un comunicado este lunes.

La responsable del Programa de Formación e Inserción Laboral de Càritas Barcelona, Dessirée Garcia, ha afirmado: "Las personas merecen una igualdad de oportunidades, porque tienen rostro, porque tienen nombre, porque tienen una vida, y no pueden cubrir las necesidades más básicas".

Todas las personas atendidas por Càritas Diocesana de Barcelona están en situación de precariedad, y mientras el 80% está en paro, para el 20% restante aumenta la precariedad, y la mitad trabaja a tiempo parcial aunque querría trabajar más horas (subempleo), pero no lo encuentra.

La entidad ha detectado que este subempleo afecta a más de 230.000 personas en Catalunya, según la última Encuesta de Población Activa (EPA), con contratos temporales de muy corta duración, escasa protección social (poca cobertura por desempleo y escasa cuantía de las pensiones), bajos salarios y dificultades para conciliar vida laboral y familiar, a lo que se suma un paro elevado (458.700 parados).

Ha subrayado que aunque haya aumentado un 3,3% el empleo, el 46,5% de las personas paradas son de larga duración, más de 200.000, y, de estas, casi 150.000 hace más de dos años que no encuentran trabajo, a lo que se suma que más de 90.000 hogares no perciben ningún ingreso, y representan el 2,9% del total de hogares catalanes.