Torra sigue riéndose de la Justicia y se plantea no comparecer ante el TSJC

 

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha asegurado sobre su citación para declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) por mantener lazos amarillos en edificios oficiales durante la campaña electoral: "No ir sería poner de manifiesto que nos tenemos que plantar".

En una entrevista este domingo en 'El Punt Avui', Torra ha defendido que su respuesta sobre si irá o no al juicio hay que entenderla en el marco de cuatro principios: "Democracia, republicanismo, derechos humanos, civiles y políticos y desobediencia y no-violencia".

"Quien tiene el problema es el TSJC y nosotros tenemos que saber si respeta la separación de poderes", ha afirmado Torra, que no ha aclarado si acudirá o no a la citación el 25 y 26 de septiembre, ya que coincidirá con el Debate de Política General en el Parlament.

A Torra se le juzgará por presunto delito de desobediencia o, subsidiariamente, un presunto delito de denegación de auxilio a la autoridad competente,  según un comunicado del TSJC, cuya sala civil y penal ha notificado este lunes el auto con la relación de prueba admitida.

El Ministerio Público pide inhabilitarle durante este periodo para ejercer cargos públicos electivos de ámbito local, autonómico, estatal o europeo, así como para el ejercicio de funciones de gobierno en estos ámbitos, lo que conlleva la privación definitiva de estos cargos y honores durante el tiempo de condena y la imposibilidad de obtenerlos en este tiempo.

RESPUESTA A LA SENTENCIA

Preguntado por la respuesta a la sentencia por el proceso independentista, ha destacado: "Millones de ciudadanos volveremos a hacer otro 3 de octubre como reacción a la sentencia", y ha añadido que esta reacción entra dentro de las posibles acciones de desobediencia.

Ha dicho que Catalunya está a punto de cerrar una etapa y que la nueva que comienza será proactiva y no reactiva, y ha opinado que "hay brotes de esperanza y el convencimiento por parte de todos los actores políticos" y que la situación no es muy diferente a la que había momentos antes del 1 de octubre.

Torra ha reconocido que hay discrepancias dentro del independentismo fruto de las elecciones de los pasados meses, y se ha preguntado: ¿Esta situación es la que queremos para enfrentarnos a una sentencia como la que nos viene? ¿O no nos conviene a todos mucho más trabajar para dar una respuesta conjunta desde la mayoría independentista que hay en el Parlamento?".

Sobre la posibilidad de un gobierno de concentración, el presidente ha asegurado que le parece "lógico que sucediera" si se marca un horizonte por el derecho a la autodeterminación y ese gobierno está más enriquecido con otras personalidades.

A VUELTAS CON LA INDEPENDENCIA

En otra entrevista, esta vez en TV3, el presidente de la Generalitat ha defendido que la Diada de la próxima semana y la sentencia del 1-O "pongan la independencia otra vez en el centro".

Torra ha pedido proponerse ya "instituciones fuertes, un proyecto como el de los Presupuestos --2.500 millones de más que tenemos y necesitamos-- y un horizonte", que es el de la independencia. "Objetivo independencia: este debe ser el horizonte de este país a partir de las sentencias", ha añadido.

Sobre si 'instituciones fuertes' puede significar un Govern de concentración, ha respondido que "instituciones fuertes quiere decir un Govern fuerte, quiere decir un Parlament fuerte, quiere decir unos ayuntamientos fuertes también".

"Solo así, con instituciones fuertes y con la ciudadanía comprometida, fuimos capaces de tirar adelante el 1-O. Y esta fórmula es la fórmula; no hay otra", y ha definido aquella votación como fecha fundacional de la república.

Sobre el nuevo movimiento 'Tsunami Democràtic', ha dicho que le inspira algo positivo por el concepto 'democrático'.