​Consternación entre los vecinos de Badalona por el edificio en derribo por aluminosis

 

Vecinos del edificio de Badalona (Barcelona) afectado gravemente por aluminosis que el Ayuntamiento de la ciudad ha ordenado derribar han manifestado su consternación ante el inicio de las tareas de derrumbe con sus pertenencias en el interior del inmueble.

Algunos de los inquilinos han acudido a las inmediaciones del edificio donde este martes Construccions Roig ha instalado dos grúas para el derribo del edificio del número 16 del pasaje de la Torre, en el barrio de La Salut de la ciudad.

Construccions Roig ha empezado sobre las 12.30 horas de este martes los trabajos de derribo manual. 

Una de las dos grúas instaladas en las inmediaciones de la finca ha subido a cuatro operarios con una cesta hasta la azotea del edificio, donde han empezado a retirar antenas y a derruir el edificio de forma manual.

Estas antenas y el material retirado por los operarios se coloca en la cesta, que lo descarga a nivel de suelo, en un solar cercano habilitado para ello, y también hay una segunda grúa que prevé retirar los escombros cuando se produzcan.

Debido a la posibilidad de que el edificio colapse, se han desalojado los vecinos de 14 fincas, que no podrán volver a sus pisos durante el derribo o hasta que se garantice la seguridad en todos estos edificios.

El cuarto teniente de alcalde y concejal de Seguridad, Gobierno y Territorio de Badalona (Barcelona), Rubén Guijarro, ha dicho que los operarios que trabajan en el derribo del edificio de La Salut con aluminosis intentarán recuperar objetos personales de los vecinos desalojados.

En declaraciones a la prensa, ha apuntado que cuando se retiren los escombros del derribo se intentará "siempre y cuando la seguridad de los operarios no quede comprometida", recuperar objetos personales del interior de los pisos, ya que los vecinos desalojados tuvieron que abandonar sus casas sin recoger nada.

Guijarro ha explicado que los trabajos de derribo pueden durar semanas, ya que el estado del edificio obliga a que el derribo se haga de forma manual hasta que se llegue a la segunda planta o hasta que no haya riesgo de colapso, según indiquen los operarios.