Cerdos radiactivos han ocupado Fukushima y están en guerra con los vecinos que quieren volver

Según los informan los medios locales japoneses, los cerdos híbridos radiactivos se han apoderado de una parte de la zona de exclusión nuclear en Fukushima. Los científicos descubrieron la amenaza cerca de la antigua planta de energía japonesa en las áreas urbanas desocupadas por los humanos a raíz del colapso de 2011 en la planta.

Descubrieron que el jabalí japonés, el jabalí local del país, ha invadido un área que alguna vez estuvo habitada por 160.000 personas, según un estudio sobre la vida silvestre en la región. Quienes los han visto los describen como "arrogantes y agresivos". También comenzaron a cruzarse con los cerdos domesticados que habían escapado y que habían dejado atrás sus dueños anteriores.

Cerdos radiactivos de Fukushima

Esto ha resultado en un nuevo tipo de híbrido de jabalí y cerdo de la zona de exclusión inicial, que está a 20 km de la planta nuclear y donde se creía que los niveles de radiación eran los más altos. Este horrible brebaje radiactivo ahora representa hasta el 10 por ciento de la población local.

Se teme que estos nuevos verracos tengan la inteligencia salvaje del jabalí combinada con los hábitos de domesticación de los cerdos.

Los humanos que intentan recuperar sus antiguas casas alrededor de la planta de Fukushima están en guerra con los nuevos colonos. Las zonas de exclusión de Fukushima se han levantado gradualmente por etapas desde 2011 para que las personas regresen a sus hogares. Sin embargo, algunos de los cerdos agresivos se han mantenido firmes y han atacado a los humanos. En algunos casos, los humanos han recurrido a cazarlos.

Los detalles de cómo la radiación afectó a la fauna local fueron publicados recientemente en las Actas de la revista Royal Society B . El estudio encontró que los híbridos no mostraban signos de mutación, a pesar de estar contaminados con hasta 300 veces la dosis segura para humanos del isótopo radiactivo cesio-137.

Los científicos sugieren que si bien el mestizaje de la especie no ha tenido efectos nocivos, creen que los genes del cerdo eventualmente diluirán la composición genética híbrida hasta que "los genes introgresados finalmente desaparezcan en esta área". No es infrecuente que las áreas urbanas sean conquistadas por la naturaleza después de las evacuaciones humanas, igual que sucedió en el área que rodea el lugar del desastre de Chernobyl de 1986.