Comín trata de justificar los presupuestos, atacando a los medios de comunicación
La oposición le recuerda la saturación de las urgencias y le reprocha su "tono triunfalista". / El presupuesto para listas de espera ha pasado de los 96 millones de euros previstos en el plan de choque a 45 millones.
El conseller de Salud de la Generalitat, Toni Comín, ha defendido que el proyecto de Presupuestos de la Generalitat para 2017 sobre salud revierte en un 37% el recorte de 1.500 millones de euros registrado en valores absolutos entre 2010 y 2014.
En la comisión de Salud del Parlament este miércoles, ha detallado que las cuentas de salud prevén un aumento de 408,4 millones de euros al contar con un presupuesto de 8.806,7 millones de euros para la Conselleria.
"Los ciudadanos nos piden revertir los recortes y el mensaje que damos hoy es que el departamento de Salud está revirtiendo los recortes", ha dicho el conseller, si bien ha admitido que la mejora es insuficiente y que la voluntad es recuperar el ajuste y superar las cuentas de 2010.
También ha incidido en que el gasto sanitario per cápita del presupuesto consolidado ha crecido un 5,8% al pasar de 1.095 en 2015 a 1.186 euros en 2017, y se recupera un 45% el recorte entre 2010 y 2014 en este ámbito.
El diputado de C's Jorge Soler le ha reprochado el tono triunfalista por celebrar las cuentas y Assumpta Escarp (PSC) ha dicho que "se hace difícil hablar de presupuestos sin dejar de pensar en los miles de ciudadanos que esperan en urgencias", rechazando que el 37% de reducción de los recortes sea motivo de alegría colectiva.
Desde el PP, Santi Rodríguez ha cuestionado las cifras de Comín al revelar que el presupuesto previsto para 2017 pierde en valores relativos, por lo que "la prioridad de la salud del Govern ha bajado", a lo que Comín ha respondido que lo importante es el valor liquidado.
"No son los presupuestos de rescate ni de reversión que necesitamos", ha criticado Àngels Martínez (CatSíQueEsPot), y Albano-Dante Fachín ha añadido que el 63% de recorte restante lo impulsaron los compañeros de viaje de Comín que son de derechas, en sus palabras.
LISTAS DE ESPERA
Sobre el presupuesto para listas de espera, que ha pasado de los 96 millones previstos en el plan de choque a 45 millones, Comín ha justificado que se debe a la mejora de la eficiencia que ha permitido reducir mucho más de lo esperado las colas de los pacientes que superaban el tiempo de garantía y de referencia.
Según el conseller, la lista de espera para intervenciones quirúrgicas ha pasado de 19.855 pacientes en diciembre de 2015 a 16.066 personas en el mismo periodo de 2016, y la previsión para finales de 2017 es que haya 12.277 enfermos esperando a ser atendidos, es decir, un 61,8% menos respecto a 2015 gracias a la eficiencia.Afirmación que es desmentida por los profesiones.
Por esta razón, solo son necesarios 45,7 millones para alcanzar el objetivo de absorber un 10% el número de pacientes en lista de espera quirúrgica.
CAMPAÑA DIFAMATORIA
El conseller de Salud, Toni Comín, ha atribuido la "constante campaña difamatoria" de la que es objeto su persona al proceso de desprivatización del sistema sanitario que ha iniciado.
Lo ha afirmado en el turno de réplicas tras presentar el proyecto de Presupuestos para 2017 en materia de salud en el Parlament, donde ha considerado que la citada publicación es una "difamación continua desde la primar página", que ha relacionado con la finalización de la actividad pública en hospitales propiedad del grupo Quirónsalud.
Ha añadido que el departamento de salud está librando una batalla compleja y que le gustaría le acompañaran los sindicatos de clase en vez de poner dificultades: "Pensaba que todos estábamos a favor de reforzar el carácter público del sistema sanitario pero veo que no es así".. El conseller ha enmascarado su mala gestión en salud con los ataques personales de los medios de comunicación
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