El 12,3% de los jóvenes barceloneses son 'ni-ni'
El informe 'Jóvenes con necesidad de inserción educativa o laboral' recoge que aumentan las personas con estudios postobligatorios sin empleo. Un 4,5% de jóvenes de entre 16 y 24 años sostienen que no quieren estudiar ni buscar empleo.
El 69,4% de los hogares de los jóvenes que no estudian ni trabajan hay una persona que también está en paro.
El 13,2% de los jóvenes barceloneses no estudia ni trabaja, un porcentaje inferior a la media catalana y española (15%) pero superior a la europea (12%). El informe 'Jóvenes con necesidad de inserción educativa o laboral' recoge los datos. El Ayuntamiento de Barcelona ha encargado el documento al Observatorio de la FP de la Fundación BCN Formació Professional.
Laia Ortiz, la teniente de alcalde de Derechos Sociales de Barcelona, ha explicado que el estudio detecta que falta acompañamiento personalizado en las etapas de transición al mundo laboral. Ortiz ha lamentado que hay programas profesionalizadores que no atraen y no dan salidas: "Debemos encontrar los ritmos y los tempos de unos jóvenes que tienen mucha complejidad en su entorno".
La exclusión del sistema educativo y laboral afecta más a los hombres, especialmente a aquellos que están entre los 20 y los 24 años. El 69,4% de los hogares de los jóvenes que no estudian ni trabajan hay una persona que también está en paro.
El informe expresa que el porcentaje del 13,2% de jóvenes que no estudia ni trabaja equivalen a un total de 17.038 personas, y, del ellos, un 3,9% tienen estudios postobligatorios y 7,4% estudios de ESO o inferiores.
Miguel Àngel Essomba, comisionado de Educación, afirma que se debe "revertir la situación" para conseguir una transición entre los estudios y el mundo laboral de una forma más coordinada.
El 4,5% de los jóvenes de entre 16 y 24 años no tienen previsto estudiar y tampoco buscar empleo.
El Ayuntamiento de Barcelona ha mostrado su preocupación ante el número de personas con estudios postobligatorios que se encuentran en situación de inactividad. Aunque el porcentaje de jóvenes que están estudiando y trabajando ha incrementado un 20%.
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