Ponsatí carga contra la inspección de libros de texto catalanes por oscurantista y franquista
La nueva consellera de Enseñanza de la Generalitat, Clara Ponsatí, ha visto "oscurantismo y censura franquista" en la orden de inspeccionar los libros de texto catalanes anunciada en mayo y que podría realizarse en setiembre.
La nueva consellera de Enseñanza de la Generalitat, Clara Ponsatí, ha visto "oscurantismo y censura franquista" en la orden de inspeccionar los libros de texto catalanes anunciada en mayo y que podría realizarse en setiembre.
Según el jefe de la comisión de libros de texto del Gremi d'Editors de Catalunya, Antonio Garrido, la medida podría llevarse a cabo a partir del mes de septiembre o a final de año, si bien "no es una prioridad" del Gobierno central. "No vemos prisa: en algún momento nos pedirán los libros", ha asegurado Garrido, que ha depositado máxima confianza en la profesionalidad de editores y autores de las publicaciones, por lo que no prevé problemas.
Aunque el Ministerio de Educación mantiene su intención de llevar a cabo esta revisión que anunció como urgente, Garrido resta prisa al anuncio, y ha destacado la existencia de contactos habituales de la Asociación Nacional de Editores de Libros y material de Enseñanza (Anele) --cada dos o tres meses-- con las administraciones.
De hecho, ha hablado de una reunión general de representantes de Anele y del Ministerio en septiembre, después de que el secretario de Estado de Educación, Marcial Marín, encargara un "informe detallado y urgente" a la alta inspección sobre los libros de texto en varias comunidades autónomas, entre ellas Catalunya, por planteamientos ideológicos partidistas.
Ante esta situación, la consellera catalana de Enseñanza, Clara Ponsatí, ha visto "oscurantismo y censura franquista" en la orden de inspeccionar las publicaciones, y ha situado la decisión en una mera operación de propaganda.
INSTINTOS AUTORITARIOS Y MERA PROPAGANDA
"No se entiende por qué se escandalizaron tanto de que se pusiera el foco en la geografía de Catalunya. Esto pasa en todo el mundo, que todas las materias se explican en referencia al entorno inmediato", ha argumentado la consellera.
A su juicio, "puede haber libros de texto mejores o peores, pero no es trabajo de nadie el de censurar libros, es inaudito, incluso, si hubiera libros que estuvieran muy mal".
"Nuestro trabajo es educar a maestros que tengan claro que los libros de baja calidad no se deben utilizar", y ha cargado contra los instintos autoritarios, que ha dicho que mantiene el Gobierno central.
"Nuestra postura es que el departamento de Enseñanza no hace censura de los libros de texto, no vigila las editoriales, no vigila a los profesores cuando escogen libros de texto", ha aseverado Ponsatí.
Se trata de una "operación propagandística que nos sorprende porque creemos en la libertad de expresión y la libertad académica", ha opinado Ponsatí, que ha acusado al Gobierno central de mantener el sistema educativo catalán bajo una situación de libertad vigilada.
Escribe tu comentario