El Gobierno cree que Puigdemont no delegó el voto porque Rajoy amenazó con recurrir al TC

 

Rajoy amenazó con recurrir al Constitucional. 

El Gobierno de Mariano Rajoy ha admitido que se ha producido "cierta normalidad" en la sesión constitutiva del Parlament, en la que se ha elegido al republicano Roger Torrent como nuevo presidente de la institución. 

Además, desde Moncloa creen que ha tenido un efecto disuasorio su anuncio de que recurriría al Tribunal Constitucional si se permitía que el expresidente Carles Puigdemoint y los otros exconsejeros huidos en Bruselas delegasen su voto.

En el Ejecutivo consideran que "no ha habido sorpresas" en la sesión constitutiva del Parlament respecto a las mayorías en la Mesa, después del acuerdo alcanzado entre ERC y Junts per Catalunya para situar a Torrent al frente de la Cámara. 

Según fuentes del Gobierno, los diferentes actos "se han producido con una cierta normalidad".

Rajoy anunció este martes que el Gobierno recurriría inmediatamente al Constitucional si en la sesión constitutiva del Parlament se permitía delegar el voto desde Bruselas a Puigdemont y los otros cuatro exconsejeros. 

Según el Ejecutivo, los fugados en Bélgica no han solicitado esa delegación de voto (como sí han hecho los encarcelados Oriol Junqueras, Joaquim Forn y Jordi Sànchez) porque el Gobierno había anunciado que presentaría ese recurso. 

"No tenemos la menor duda", recalcan, para insistir en que esa amenaza del TC ha tenido efecto disuasorio.

LA MESA DE EDAD

En cualquier caso, las fuentes del Ejecutivo consultadas subrayan que "en ningún caso" las decisiones adoptadas por la Mesa de edad que organizó hoy el debate en el Parlament puede sentar ningún tipo de precedente parlamentario.

Así, añaden que estarán atentos a cualquier decisión que tome la Mesa que formalmente se ha constituido este miércoles.

Esta misma mañana, el Gobierno ya ha avanzado que seguirá la manera en que se anuncie la candidatura de Puigdemont para "actuar en consecuencia".

Según el Ejecutivo, todo el mundo sabe, "incluidos los suyos", que Puigdemont no va a ser president y que solo mantiene su candidatura con afán "propagandístico".

Después de que Torrent en su primer discurso ante el Parlament haya dicho que su objetivo es "coser la sociedad catalana compuesta por identidades cruzadas", fuentes del Ejecutivo se han expresado con prudencia a la espera de ver cuáles son sus próximos movimientos.