Esta es la postura del Cercle d'Economia sobre reforma de la financiación
La entidad ve la actual coyuntura como una "gran oportunidad" para abordar desequilibrios territoriales
El Cercle d'Economia ha subrayado que la reforma del sistema de financiación autonómica “ni puede aplazarse ni debe desaprovecharse la oportunidad actual”. Así lo manifiesta en una nota de opinión publicada este jueves 13 de marzo, bajo el título La reforma del sistema de financiación: una oportunidad social, económica y política.
La institución, presidida por Jaume Guardiola, sostiene que una reforma adecuada permitiría que el autogobierno de Catalunya “diera un salto adelante” y que, además, todas las comunidades autónomas se verían fortalecidas sin excepción.
En el comunicado, el Cercle destaca que el contexto actual representa “una gran oportunidad, esperada durante mucho tiempo”, para corregir los desequilibrios territoriales a través de una colaboración leal y constructiva entre administraciones. “Sería un grave error no aprovecharla. La frustración de las expectativas generadas podría convertirse en un nuevo motor de desafección”, advierte la entidad.
El Cercle considera que el sistema de financiación es un elemento clave para reforzar la solidaridad entre territorios, y que su reforma es esencial para preservar tanto la cohesión social como la territorial.
Reforma de la Agencia Tributaria de Catalunya
En su análisis, el Cercle d'Economia también sostiene que la reforma es “imprescindible” para dotar a la Generalitat de los recursos necesarios para afrontar los retos crecientes de Catalunya.
Aunque reconoce que los principios de eficiencia y eficacia abogan por la existencia de una única agencia tributaria, el Cercle argumenta que el peso de la economía catalana justifica el refuerzo de las competencias de la Agència Tributària de Catalunya (ATC). En este sentido, considera que si se dota a la ATC de los recursos adecuados y se establece un mecanismo de coordinación eficaz con la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), la posible pérdida de eficiencia sería “insignificante”.
La entidad también señala que será fundamental definir con precisión el ámbito de las nuevas competencias que asuma la ATC en gestión, recaudación, liquidación e inspección para evitar malentendidos o solapamientos con otras administraciones. Asimismo, niega que un mayor protagonismo de la ATC implique “la desaparición del Estado en Catalunya”.
Una reforma clave y un amplio consenso
El Cercle recuerda que “no es la primera vez que la ambición reformadora procedente de Catalunya actúa como motor de cambio en el conjunto de España” y pone en valor los avances históricos impulsados desde la comunidad.
Afirma que existe “un amplio consenso” en la necesidad de simplificar el modelo actual, hacerlo más transparente y revisar el cálculo de los mecanismos de solidaridad interterritorial. A su juicio, el nuevo sistema debería garantizar más recursos para el conjunto de las comunidades autónomas. Para lograrlo, propone que aquellas comunidades que lo deseen y tengan capacidad puedan compartir bases fiscales con la administración central o asumir una mayor gestión de los tributos cedidos.
“El Estado debería seguir disponiendo de recursos suficientes para prestar los servicios que ofrece a todos los ciudadanos”, señala el Cercle, que añade que “todas las comunidades deben contar directamente con los recursos necesarios para cubrir sus gastos”.
Solidaridad gestionada por la administración central
En relación con la solidaridad interterritorial que debería mantenerse en un escenario de financiación singular para Catalunya, el Cercle considera que lo más lógico es que sea gestionada por la administración central. En cualquier caso, subraya que este mecanismo debe ser “transparente, eficaz y justo” para evitar que las comunidades que más aportan acaben disponiendo de menos recursos.
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