Las plataformas de reparto a domicilio esquivan la Inspección de Trabajo y explotan a sus ‘riders’

La precarización del sector se hace patente en que pese a las colaboraciones con ONG y obras sociales, tanto Glovo como Deliveroo cobran entre 70 y 90 euros a sus trabajadores por los uniformes y material que deben utilizar.

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Repartidor a domicilio en  bicicleta

 

Repartidor a domicilio en  bicicleta

Las plataformas de reparto a domicilio exxplotan a sus 'riders'


UGT ha denunciado este sábado que plataformas de reparto a domicilio como Deliveroo, UberEATS o Glovo están introduciendo cambios en sus modelos de gestión que ocultan información sobre sus trabajadores, los llamados 'riders', para esquivar a la Inspección de Trabajo y mejorar su imagen pública.


"Los cambios en las aplicaciones no buscan mejorarla sino evitar que a través de ellas se pueda obtener información que comprometa a las plataformas ante la Inspección de Trabajo o los juzgados de lo social", ha acusado el sindicato.


La compañía de entrega de comida Deliveroo ha eliminado la aplicación que utilizaba para asignar los horarios de sus trabajadores, que ahora se establecen a través de un sistema de evaluaciones oculto. A través de la aplicación anterior, la Inspección de Trabajo pudo demostrar que los 'riders', al contrario de lo que clama la plataforma, no pueden elegir sus horarios.


El sindicato denuncia también la cobertura por seguro de accidente de estas plataformas digitales, con una diferencia en las indemnizaciones que considera "abismal" en comparación con las establecidas en los convenios colectivos.


"Glovo paga en días lluviosos un 30 por ciento más, fomentado así el riesgo de accidentes. Recordemos que los repartidores, al ser autónomos, tienen que asumir el coste de los accidentes de trabajo", ha denunciado UGT.


La precarización del sector se hace patente, según ha defendido el sindicato, en que pese a las colaboraciones con ONG y obras sociales, tanto Glovo como Deliveroo cobran entre 70 y 90 euros a sus trabajadores por los uniformes y material que deben utilizar, además de una comisión por el acceso a la plataforma a través de la que obtienen los pedidos.

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