​Una semana de consultas del Rey, sin cambio de posturas

Comienza la semana clave para conocer si finalmente la ciudadanía tendrá que volver a los colegios electorales para depositar su voto, y lo que parece más que posible es que haya elecciones generales. No es una situación deseable, pero tal como está el panorama igual, pese a las encuestas, la situación puede cambiar para elegir al nuevo gobierno de España.

Menos mal que la selección española de baloncesto alegró al personal este domingo, tras conquistar el campeonato del mundo en un partido contra Argentina a quien le sacó 20 puntos de diferencia. Una alegría compartida por todos los que aman el deporte de la canasta y los que se añadieron para participar de la gesta de unos jugadores extraordinarios.

El Rey Felipe inicia la ronda de consultas con las distintas formaciones para conocer su voto a la posible investidura del candidato Pedro Sánchez. Si no hay cambios, de todos es conocido quienes van apoyar la investidura, los que votarán en contra y los que se van abstener. La única novedad es la manifestada por Pablo Iglesias, en un medio de comunicación, en la que le pedía al Rey que intercediese ante el presidente en funciones y líder del PSOE para que acepte su propuesta de formar gobierno y evitar nuevos comicios. Se trata de algo nunca visto por dos motivos: por solicitar al Rey que intervenga cuando siempre se ha pedido que su majestad se mantenga al margen y, segundo, porque quedan bien definidas en la Constitución las funciones del Rey. Esta petición seguro que no se atreverá a hacérsela en persona, cuando esté en vivo y en director con Felipe VI; más bien parece una acción de marketing que otra cosa.

Mientras, el resto de formaciones -menos Bildu y ERC, que han declinado despachar con el monarca- acudirán a Zarzuela para expresarle al Jefe del Estado lo mismos que hicieron en la primera ronda de consultas. Todo igual, pero es necesario -así lo marca la Constitución- realizar esta segunda consulta, que cerrará la ronda. Teniendo en cuenta las declaraciones de Sánchez en los últimos días, en las que afirmaba que si no contaba con los votos suficientes para ser investido, no optaría a la investidura, así se espera que se lo trasmita a Felipe VI.

Si finalmente se cumplen los presagios, este miércoles puede ser la última comparecencia del presidente en funciones en el Parlamento, con una legislatura que puede considerarse la más corta en los años de democracia.

Así que, tal y como está el patio, bueno será que la ciudadanía se haga a la idea de que el 10 de noviembre, por mucho que le indigne, debe acudir a depositar su voto para aquella formación que más se ajuste a su ideología, aunque como se está viendo, ¿han muerto las ideologías? Hay opiniones para todos los gustos. Lo que no se puede hacer, aunque esté muy cabreado el personal, es quedarse en casa. La democracia necesita de la participación.

Buena semana, mucha paciencia y como se dice popularmente "lo que tenga que pasar, pasará".