Un jurado absuelve a la madre que llevó el cadáver de su hija en un cochecito durante cuatro días
La pareja de la madre ha sido sentenciada a cadena perpetua
Scott Jeff, un joven de 24 años, ha sido sentenciado a cadena perpetua por el crimen de la hija de su pareja Chelsea Gleason-Mitchell. No obstante, la madre de Isabella Wheildon, que tenía dos años en el momento en el que perdió la vida, ha sido absuelta.
Isabella murió el 26 de junio del año pasado, tras haber sufrido múltiples fracturas y lesiones, y haber sido sometida a duchas frías como castigo durante semanas por parte de Jeff. A pesar del abuso evidente, el jurado concluyó que Gleason-Mitchell, aunque no intervino ni protegió a su hija, no participó directamente en la violencia que acabó con la vida de la menor. La madre admitió haber permitido la muerte de Isabella y fue declarada culpable de dos cargos de crueldad infantil.
El tribunal escuchó que tras la muerte de Isabella, la pareja intentó ocultar el crimen manteniendo su cuerpo en secreto durante cuatro días. Durante este tiempo, la niña fue llevada en su cochecito con la capucha levantada para esconder su rostro, mientras realizaban actividades cotidianas, incluyendo compras en tiendas locales. Finalmente, la policía descubrió el cadáver de Isabella en la unidad de alojamiento temporal, debajo de mantas en una ducha, después de que una amiga de Gleason-Mitchell recibiera un mensaje preocupante sobre la muerte de la menor.
La autopsia reveló que Isabella había sufrido numerosas fracturas y lesiones en el cuerpo, algunas de las cuales habían ocurrido tan solo horas antes de su muerte. La causa de la muerte fue una embolia de médula ósea, resultado de las fracturas que permitieron que la médula ósea entrara en su torrente sanguíneo, obstruyendo sus pulmones y provocando su fallecimiento.
El juez encargado del caso, David Garnham, ordenó la prisión preventiva para ambos acusados hasta la sentencia definitiva, programada para el 13 de diciembre. En sus declaraciones, Garnham dejó claro que Jeff enfrentará cadena perpetua por el asesinato de Isabella. Durante el juicio, se hizo evidente la indiferencia de Gleason-Mitchell ante el sufrimiento de su hija, aunque los fiscales no pudieron probar su implicación directa en los actos violentos.
Escribe tu comentario