¿Qué hay de lo mío?, le preguntan a Pedro Sánchez

Como la política española estaba algo “aburrida”, vienen sus señorías y sueltan la bomba de la sentencia del Caso Gürtel que condenan a unos cuantos miembros ilustres del PP. La sentencia ha dejado muy tocados a los populares por mucho que lo intenten disimular, negar lo evidente y decir que los que están ahora no están pringados en nada de nada. Los que hay ahora son unas auténticas hermanitas de la caridad que son injustamente perseguidos.

La estocada de la justicia a los populares, es muy parecida a las que en sus días de gloria hiciera el mítico matador, Manolete, en sus mejores tardes de triunfos.

Esta sentencia ha puesto al gobierno de Mariano Rajoy en una situación tremendamente complicada, y ha hecho bramar a la oposición, la ciudadanía y hasta la bolsa. No es una situación agradable para nadie, menos para el presidente del gobierno que ha visto como los cimientos de su partido tienen aluminosis, sin posibilidad de arreglo: ni dimisión, ni convocatoria de elecciones que sería lo políticamente deseable. El arquitecto se ha puesto una venda en los ojos para no ver lo que está sucediendo. Ante este panorama, el PSOE ha cogido la delantera y ha presentado una moción de censura que se debatirá este jueves y viernes. Se ha echado a la piscina sin red. No podía hacer otra cosa, por responsabilidad política con el país.

Albert Rivera de Ciudadanos que ya se ve en la Moncloa - según las encuestas- ha quedado descolocado por la rapidez de los socialistas y ha propuesto que ni él ni Sánchez ocupen  la presidencia hasta la convocatoria de nuevas elecciones. Lo que quiere decir es que no apoyará el tema. Podemos, en boca de Pablo Iglesias primero dió su apoyo a la propuesta y ahora afirma que consultará a las bases, como está mandando. Al podemita le gustan mucho las consultas. Los partidos nacionalistas que dicen estar hasta el gorro de Rajoy, quieren sacar rentabilidad a su apoyo y ya se sabe: la caridad empieza por uno mismo.

España, es el país del  ¿qué hay de lo mío?.  No se puede evitar, se lleva en los genes. En esta ocasión, los nacionalistas le hacen esta pregunta a Pedro Sánchez. Si no atiende a sus pretensiones, “ya no lo ajunta”, como dicen los niños en el patio del colegio y permiten que Rajoy siga gobernando. A más de uno, ya les viene bien “contra el PP se vive mejor”. Mucha rentabilidad le han sacado a Mariano.

El PSOE, si no hay cambios de última hora, no va a conseguir tirar adelante la moción de censura, pero tiene la obligación de presentarla. Al resto de formaciones políticas, con su mercadeo de votos se les va a ver mucho el plumero y tendrán que justificar ante la ciudadanía sus decisiones.

En una situación de excepcionalidad como la que se está viviendo, unos cuantos van a quedar bien retratados por mucha liturgia que le echen a su discursos.

Mientras Rajoy, cuestionado por una buena parte de sus partidarios, en privado, solo él sabe lo que quiere hacer o quedarse parado para ver si pasa la tormenta. Lo malo del asunto es que no es una tormenta cualquiera, esta viene  acompañada de aparatos eléctricos que lo pueden electrocutar.