Dicen que cada día las personas libran una batalla; por el trabajo, la libertad, la defensa de los derechos humanos, por poder pagar los gastos, por sacar adelante a la familia y así podríamos hacer una larguísima lista. Pero hay una batalla que está por encima de todas: la batalla contra el cáncer, que es la lucha por la vida. Si esta se gana las demás se van superando por muy cuesta arriba que se pongan.
Dicen que cada día las personas libran una batalla; por el trabajo, la libertad, la defensa de los derechos humanos, por poder pagar los gastos, por sacar adelante a la familia y así podríamos hacer una larguísima lista. Pero hay una batalla que está por encima de todas: la batalla contra el cáncer, que es la lucha por la vida. Si esta se gana las demás se van superando por muy cuesta arriba que se pongan.
Hoy Pilar, que ha pasado seis veces por el campo de batalla, ha conseguirlo salir adelante después de que el pasado viernes volviera a ese lugar tan familiar para ella, pero tan frío como es el quirófano de un hospital para ser operada de nuevo de esa enfermedad que se resiste a abandonarla y que de vez en cuando la vuelve a visitar en su cuerpo tan castigado por sus efectos.
Hacía dos días que me había enterado de su nueva recaída y le envié un correo dándole ánimos y diciéndole que había ganado varias batallas y que solo faltaba ganar la guerra, que no se rindiera. Su respuesta fue que "es un paso más en esto tan largo y se me acaban las pilas a ratos". La operación ha salido bien y aunque débil está ya en su casa, al lado de los suyos y como ella me decía ayer, esperando la próxima, porque el médico le ha dicho que hay otra operación más.
Me lo decía con voz cansada pero con la convicción de una mujer que no piensa rendirse y que estoy segura que va a salir de esta por muy dura que sea esta enfermedad. La actitud frente a ella debe ser la de no bajar la guardia, estar animada aunque las plaquetas te dejen hecha una piltrafa, aunque te mires al espejo y digas, cuánto he cambiado, pero eso no tiene la menor importancia. El objetivo es solo uno: ganar la batalla. Pilar es de esas mujeres muy femeninas, pero nada débil, la vida le ha dado muchas cosas, pero no han sido gratuitas, ha tenido que luchar y emplearse a fondo. Es una ganadora de las cosas, con sus altibajos, como cualquier persona, pero esta cruzada la va a ganar, aunque el precio que haya tenido que pagar sea muy grande. La vida es muy dura y en muchos casos, como este, muy injusta. Pilar, esto es una carrera de fondo en la que no debes pararte ni para coger aire. Te lo dice -y es la primera vez que lo hago públicamente-, alguien que lleva 22 años de paz después de haber luchado contra el mismo enemigo que tú.
Pilar la vida es lucha, así que no te rindas y a seguir luchando? que nos quedan muchos cafés que tomar aún?
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